Una obra sobre Carmen Amaya descubre el baile de Nazaret Reyes

El estreno de Carmen Amaya. Evocaciones, dirigido por Pilar Távora y protagonizado por los bailaores Juana Amaya y Rafael Amargo, ha supuesto el descubrimiento de Nazaret Reyes, de 11 años e hija de Juana Amaya. Aunque los padres de la niña, que estudia sexto de primaria y va para abogada, ya han dicho que no quieren otra artista en la familia.

Nazaret, sin parentesco alguno con Carmen Amaya, se reveló como perfecta heredera de su baile racial y su poderío. Este montaje sobre la vida de la bailaora que nació descalza en el Somorrostro barcelonés se estrenó el miércoles en el teatro Lope de Vega de Sevilla, dentro de la Bienal de Flamenco, y recibió un caluroso aplauso del público; pero defraudó a muchos.

El público destacó el baile de Juana Amaya y Rafael Amargo, pero especialmente la presentación de Nazaret. En Carmen Amaya. Evocaciones, la directora acudió a la estética tavoriana para crear "un espectáculo muy didáctico que no deja lugar a la imaginación", según comentó un buen aficionado. Entre los músicos, los aplausos fueron para la cantaora Macarena Giráldez. La sorpresa, siempre presente en las obras del padre de la directora -Salvador Távora-, llegó en esta ocasión con las acrobacias de Raquel Ramírez.