Una ex novia de Adalid asegura que éste la maltrataba

"Me engañaba constantemente y cuando lo descubría me pegaba. Si no se hacía lo que él quería, también me pegaba". De esta forma describió ayer ante el jurado María José López su relación con Fernando Adalid, acusado del asesinato de la médica Gloria Sanz en enero de 2003. Este testimonio de la acusación vino a reforzar la tesis de que Adalid ya tenía antecedentes de malos tratos antes de comenzar su relación con la víctima y, además, aportó también otras analogías. Así, López aseguró que su relación con Adalid estaba basada en "mentiras", algo que también ocurrió entre el acusado y la fallecida, puesto que él, que trabajaba de taxista, mantuvo siempre ante su ex novia que ejercía de profesor de inglés.

López aseguró también que su relación con Adalid se desarrolló hace 15 años, y que ella dejó de medicarse hace sólo tres años y después de recibir asistencia psicológica como consecuencia de las agresiones sufridas.

Durante la jornada de ayer el único testigo que aportó la defensa fue el de Manuel Rodés, propietario de la fábrica donde trabajaron los padres del acusado. Rodés aseguró que la madre de Adalid "sentía que había demasiada diferencia de clase entre los dos y temía que esto le pudiera traer algún desengaño a su hijo".