"Se van a cargar el fútbol"
Baraja acusa a los directivos de explotar a los jugadores saturándolos de partidos
A Baraja, de 29 años de edad, le salió ayer la vena reivindicativa. "Desde aquí, mi denuncia. Ya está bien de aprovecharse de los jugadores", proclamó, enérgico, el centrocampista de la selección española desde la tarima que compartía con Raúl y Romero en una conferencia de prensa conjunta durante la concentración de España en el parador valenciano de El Saler. El equipo nacional viajará hoy a Sarajevo para comenzar mañana en Zenica, ante Bosnia-Herzegovina, la fase de clasificación para la Copa del Mundo de Alemania 2006.
Baraja arremetió contra la saturación del calendario después de que ayer mismo no pudiera entrenarse por sentirse cansado: lleva nueve encuentros en 21 días. Y el curso pasado sumó 64 oficiales entre su club, el Valencia, y la propia selección. Precisamente, fue el internacional español con más choques disputados. Le siguieron Raúl (63), Míchel Salgado (61), Casillas (60) y Vicente, Marchena y Albelda (56).
El valencianista totalizó 64 contiendas el curso pasado y ahora lleva nueve en 21 días
"Los futbolistas nos adaptamos a todo lo que nos dicen hasta llegar a la extenuación. Pero se puede ver que es una barbaridad. Es un tema de los directivos, que se tienen que dar cuenta de que se van a cargar el fútbol o de que los jugadores no vamos a poder rendir a un nivel alto", resaltó.
"Todos queremos jugar. Pero, cuando abusan de uno, pasan cosas como la de Ayala. Y más que van a pasar", advirtió Baraja en referencia a la lesión del central argentino, también valencianista, tras haber empalmado sin descanso la Liga, la Copa de América y los Juegos Olímpicos de Atenas, en los que se lastimó. Así, pidió la colaboración en la protesta de sus compañeros: "O todos alzamos la voz o nos quedamos en la misma línea".
De momento, todos alzan la voz para ensalzar al nuevo seleccionador, Luis Aragonés. Según Baraja, España trabaja ahora más los dos aspectos en los que más carencias tenía, "la táctica y la mentalidad", en relación con su predecesor, Iñaki Sáez. Al coro de halagos se unió Raúl, que declaró: "Luis nos va a venir muy bien. Tiene una ilusión enorme".
El partido ante Bosnia se disputará a 70 kilómetros de Sarajevo, en Zenica, en el centro del país, en un estadio cuyo aforo es de 13.000 espectadores. "Si el mes pasado pudimos empatar contra Francia en su terreno, ¿por qué no podríamos ganar a los españoles en el nuestro?", se preguntó ayer Salihamidzic, del Bayern Múnich y uno de los mejores jugadores bosnios. "En Zenica somos invencibles", añadió. Desde la perspectiva española, la clave será "la mentalidad", dijo Baraja. "Jugar a lo práctico en este tipo de campos es fundamental", recordó.
Finalmente, viajarán los 22 convocados por deseo expreso de Luis pese a que en el banquillo sólo podrán estar 18. El técnico ha dejado ver la alineación decidida, pero con una incógnita: el portero. Ayer dedicó casi todo su tiempo a Casillas y Cañizares, a los que corrigió en los balones aéreos cruzados. Los últimos ensayos apuntan a que el elegido será Casillas, que ha ganado enteros tras el envite con Escocia en perjuicio de Cañizares, titular ante Venezuela.
Los centrales serán Puyol y Helguera. Los laterales, Salgado y Romero, que vuelven tras su ausencia en la Eurocopa. Los medios centro, Albelda y Baraja, acompañados en las alas por Víctor y Vicente. Y los delanteros, dos viejos conocidos, Raúl y Morientes.
Respecto a la polémica suscitada en los últimos días sobre su titularidad, Raúl confesó sentirse "en el ojo del huracán tanto para lo bueno como para lo malo". "Aquí todos tenemos los mismos privilegios y nadie me va a quitar la ilusión que tengo. Cuando no tenga hambre de fútbol, me iré a casa", avisó el capitán, máximo goleador de la historia de la selección con 39 goles en 77 partidos.
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