Sanz cree que el nuevo rector de la Politécnica de Valencia debe elegirse en las urnas

El catedrático Javier Sanz -que el viernes asumió el cargo de rector en funciones de la Politécnica de Valencia tras el nombramiento de Justo Nieto como consejero del Gobierno valenciano, se mostró ayer partidario de que el nuevo rector sea elegido en las urnas, pese a reconocer que el actual equipo no ha cumplido ni los cien días de gobierno. Sanz, que asume el rectorado hasta que el Consejo de Gobierno se pronuncie, anunció su compromiso con el programa con que ganó Nieto y ratificó en sus cargos a todo el equipo nombrado por su predecesor.

"Las elecciones no pueden tardar mucho, espero que sea más pronto que tarde", subrayó el hasta ahora vicerrector de Economía y Planificación, Javier Sanz, cargo que asumirá también mientras dure el periodo de transición abierto tras el nombramiento de Nieto al frente de la nueva macroconsejería de Empresa, Universidad y Ciencia. Aún así, Sanz reconoció ayer, en su primera comparecencia pública, que meter a la Politécnica en la vorágine de otro proceso electoral -después de haberse pasado prácticamente los últimos seis meses de elecciones en centros, departamentos y a rector debido al complejo proceso impuesto por la Ley Orgánica de Universidades (LOU)- puede provocar cierto "cansancio" entre la comunidad universitaria. Aunque también se mostró confiado en que se podrá "combinar de forma inteligente" la elección que aún faltaba para renovar la parte proporcional del claustro, tras las pasadas elecciones de marzo en que salió elegido Nieto, y poder encajar, además, "en un plazo no muy distante" la convocatoria de un segundo proceso electoral para designar al rector que deberá sustituir a Nieto.

Candidato, o no

Sin dar demasiadas pistas sobre si se presentará o no a rector, Sanz -de 56 años y catedrático del Departamento de Tecnología de los Alimentos- no ocultó su "satisfacción" por la herencia recibida de Nieto y afirmó que siempre estará a disposición de la universidad tanto "para ser candidato como para no serlo".

Sin confirmarlo, Sanz sí dejó claro a la oposición que la salida de Nieto -figura emblemática que ha estado rodeada siempre de grandes filias y fobias a lo largo del los 19 años ininterrumpidos en que ha sido rector- supone "el cambio de talante" que ésta demandaba. El programa electoral será, por tanto, el mismo con el que se reeligió Nieto, ya que Sanz fue parte activa de su confección, según recordó ayer. Pero, "las personas han cambiado", dijo, interpelando personalmente a Juan José Moragues, el último candidato en torno al que la oposición articuló una candidatura que forzó a Nieto a reelegirse por sexta vez en una segunda vuelta, con quien comparte años de militancia socialista y unas buenas relaciones.

Sanz ha sido diputado nacional por el PSOE entre 1979 y 1987, y ha ocupado distintos cargos tanto en el gobierno autonómico como en la ejecutiva local, provincial y regional del partido; mientras que Moragues, también militante socialista acaba de asumir el cargo al frente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, de la mano de la ministra Cristina Narbona. "Cualquier cambio", puntualizó Sanz, se hará "en clave de mano tendida a la oposición", ya que, precisó "ésta es la mejor manera de sacar adelante la universidad con mucha fortaleza y una mayoría reforzada".