Amparanoia descubre a sus cómplices europeos

Amparo Sánchez (Alcalá de la Real, 1969) es la cara y la voz de Amparanoia, un grupo que suena en inglés, francés o español, y del que no se sabe si hace fusión o mestizaje. "Es difícil poner etiquetas. Nosotros somos músicos que plasmamos el intercambio de culturas que es la sociedad de hoy", explica. Entre trompetas y guitarras, percusiones y ritmos soneros, lo que más destaca en Amparanoia es la voz de su cantante. "Nuestra música es una mezcla de reggae, rumba, son cubano y rock. Nos influyen las músicas y los instrumentos del mundo, con un componente cubano y latino muy fuerte", asegura.

Amparanoia no son unos recién llegados. Tras cinco discos y miles de paseos por el barrio de Malasaña, de Madrid, han editado un disco recopilatorio, Rebeldía con Alegría, con dos canciones nuevas. No es el principio del fin, sino de un nuevo camino. "Es nuestra carta de presentación, una idea que surge cuando supimos que íbamos a ir a países donde habían publicado uno o ninguno de nuestros discos". Con su gira, el Caravane Tour 2004, Amparanoia ha entrado en el circuito del worldmusic y ha paseado por el Womad o en el festival de música folk de Cambridge un lema, "Hagamos del respeto a la mujer una costumbre".

Seguidora del subcomandante Marcos, Amparo tomó la máxima de una pancarta de la Caravana Zapatista 2002. "Con nosotras decidiendo no habría tantas guerras. Nosotras parimos y sólo pensaríamos en cuidar a los demás". Sus reivindicaciones han acompañado a su éxito en Europa. "Nuestros conciertos son pura comunicación, pura fiesta. Hemos descubierto que tenemos cómplices en diferentes rincones del mundo, abiertos a escuchar música en cualquier idioma, a disfrutar con una energía y una actitud como la nuestra". Ella, sus dos hijos y su compañero Muñeco -que está detrás del grupo Ojos de Brujo- se mudan a Barcelona en septiembre. Allí les esperan amigos como Dani, de Macaco, ya consagrado por la MTV. Amparo no tiene envidia. "No necesito la aprobación de los medios de comunicación. Aporto los mejores sentimientos posibles al mundo e intento crecer como persona y como músico, que es en lo que me va la vida. Yo voy pasito a pasito, no tengo ninguna prisa por llegar". Su gira llega hoy a Ondarroa.