_
_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Nacionalidad histórica

Aunque nos pese, los valencianos no somos una nacionalidad histórica. Lo confirman los valencianos a los que sólo les entra el picor patriótico a golpe de reacciones en contra del supuesto y repetido "peligro catalán". Lo confirman tantos valencianos que sólo hablan y/o escriben en castellano, y nada más emplean el valenciano de modo anecdótico para proclamar el casi folclórico y tragicómico "visca València".

Y es que parece que el anticatalanismo continúa siendo rentable políticamente, y funciona todavía como herramienta manipuladora para sacar del desinformado pueblo valenciano el triste resultado de un buen número de votos de aquí y de allá... bien que lo sabe la gente del PP de la Comunidad Valenciana... qué bien que le viene para tapar su profunda crisis interna las manifestaciones de Maragall.. así, se nos da a los ciudadanos carnaza para despistarnos... que si nos quieren robar el agua, que si la lengua, que si la Copa del América... y ahora, el asunto de la nacionalidad histórica...

¿Pero desde cuándo se ha creído el PP-CV que somos una nacionalidad histórica? ¿Desde que Rita Barberá se vendió al secesionismo lingüístico en tiempos de González Lizondo? ¿desde que el anterior presidente, Zaplana, decidió castellanizar y vulgarizar Canal 9?

Maragall, como ciudadano libre, como presidente de uno de los territorios más importantes de la actual España, y en el marco de una conferencia en El Escorial sobre nacionalismos, afirmó que los valencianos no somos una nacionalidad histórica... y es verdad, no los somos. No lo somos porque no los sentimos, porque los valencianos manifestamos cotidianamente el desinterés por lo propio escogiendo a los gobernantes que escogemos, y dejándonos arrastrar hacia polémicas estériles mantenidas precisamente por esos gobernantes incompetentes y desgarradoramente traidores a la tierra a la que dicen -y mienten cuando lo proclaman- servir.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_