Los jóvenes indígenas reclamarán a Naciones Unidas el derecho a la autodeterminación de sus pueblos

Los 43 representantes que han participado esta semana en la Conferencia Indígena de la Juventud reclamaron ayer el reconocimiento de sus derechos colectivos y de autodeterminación. Para ello, sostuvieron estos jóvenes, debería adoptarse una Convención sobre Derechos de los Pueblos Indígenas. Está previsto que la demanda forme parte del documento Propuestas para objetivos indígenas para el milenio, que recoge las conclusiones del encuentro que se ha llevado a cabo dentro del Festival Mundial de la Juventud, con vistas a su aplicación en el año 2015. El texto se presentará a la Asamblea General de Naciones Unidas el próximo mes de diciembre con la intención de que sea adoptado por dicho órgano plenario.

Documento final

Ocho representantes de varias comunidades indígenas de todo el mundo leyeron ayer el documento final del encuentro, que reclama que estos pueblos sean propietarios de sus tierras y que controlen sus "territorios, recursos y diversidad biológica".

También abogaron por elaborar una serie de directrices legales de alcance internacional para proteger las tierras y los recursos con el fin de combatir "los efectos perjudiciales del libre comercio sobre las culturas y comunidades indígenas".

Los representantes de estos pueblos indígenas recordaron la tradicional relación de sus comunidades con el medio ambiente, y establecieron como objetivo para el año 2015 la promoción del "respeto hacia los valores de sus pueblos" por lo que respecta al entorno natural. Para lograrlo, los jóvenes indígenas reclamaron que se establezcan "programas para recuperar los ecosistemas de los territorios de los pueblos" que han sido degradados, según consta en el documento elaborado, "por Estados, corporaciones nacionales y transnacionales".

Los objetivos propuestos por la Conferencia Indígena de la Juventud prevén la necesidad de adoptar políticas destinadas a favorecer a las mujeres indígenas, así como programas educativos que incluyan "las lenguas, culturas, tradiciones orales e históricas" de estas comunidades para que puedan desarrollar sus propias formas de enseñanza.

Además, los jóvenes indígenas piden que se promueva la elaboración de un instrumento legal internacional que proteja su propiedad intelectual y cultural y la introducción de programas para combatir "la apropiación del conocimiento tradicional de los pueblos indígenas".