Unos 1.500 africanos no pudieron asistir al Fórum por falta de visado

Después de la sesión inaugural del domingo, el Festival Mundial de la Juventud se puso ayer manos a la obra. Hasta primera hora de la tarde habían llegado al recinto del Fórum de Barcelona 6.342 de los casi 12.000 inscritos. La organización, sin embargo, sólo espera la llegada de 2.000 participantes más en los próximos días. Tanto en la inauguración como en las sesiones se puso de manifiesto el problema que han tenido los delegados africanos: a muchos de ellos se les ha denegado el visado para viajar a Europa.

Del total de inscritos iniciales, unos 4.000 procedían del continente africano, hecho que no dejó de sorprender a los organizadores del encuentro, teniendo en cuenta que el número de europeos inscritos no llegaba a 4.700 y el de latinoamericanos a 2.000. A última hora de la tarde de ayer, la organización informó de que en total se han denegado 1.500 visados de jóvenes africanos procedentes en su mayoría de Sudán, Camerún y Togo.

La elevada cifra de solicitudes de este documento -aunque no se puede saber con exactitud si los 4.000 inscritos lo pidieron- hizo sospechar a las embajadas españolas encargadas de expedirlos. Algunas cancillerías, como las de Angola o Gabón (cada una había recibido 400 solicitudes para acudir al encuentro de Barcelona), dispararon las alarmas, al temer que muchos de estos jóvenes, una vez conseguida la entrada a España, optaran por quedarse en Europa en busca de una vida mejor.

El responsable de relaciones internacionales del Fórum, Damián Onsés, no podía precisar ayer a cuántas personas se les ha denegado el visado, pero calculó que no serán más que las habidas durante la Conferencia Mundial del Sida que se celebró en Barcelona hace dos años. Onsés reconoce que teniendo en cuenta el perfil del participante que acude al Festival Mundial de la Juventud ("joven, soltero, sin medios, puede ser estudiante o no"), obtener el visado no era fácil. "Nosotros hemos recomendado que sólo se acreditara a unas cuantas personas de cada delegación que puedan demostrar que son secretarios generales o presidentes de organizaciones juveniles", comentó ayer.

Otro problema añadido, explicó Onsés, el cual ha trabajado durante muchos años en organismos internacionales, es el complejo sistema de concesión de este tipo de visados: "No son los embajadores españoles quienes deciden, sino la Unión Europea, ya que se trata de visados sujetos al Tratado de Schengen y los concede una oficina central de Bruselas". "Si, por ejemplo, un chico angoleño pide un visado para España y tiene antecedentes penales en Francia, verá automáticamente denegada su solicitud".

Problemas de visados aparte, la semana empezó ayer muy animada en el Fórum. La imagen de centenares de chicos paseando por el recinto, visitando y participando en muchas de las actividades programadas para toda la semana, contrastaba con el vacío de la semana pasada, cuando no se celebró ningún diálogo. Durante los últimos siete días se registraron 116.866 visitas, casi 40.000 menos que en la última semana de julio. A pesar de que en el último consejo de administración del Fórum se decidió abandonar el objetivo inicial de visitas -cifrado en cinco millones-, las de la semana pasada recuerdan a las del mes de mayo, cuando apenas se superaron las 115.000 visitas semanales. Para alcanzar el objetivo inicial, la organización había calculado que en la primera semana de agosto acudirían 350.000 personas, tres veces más que las registradas.