Libertad provisional para el conductor que arrolló a 30 personas en Ribadesella

El juez de Instrucción de Cangas de Onís ha dejado en libertad provisional al conductor que la madrugada del domingo arrolló con su coche a una treintena de personas en el puente de Ribadesella, localidad del oriente asturiano que se encontraba en fiestas. Según fuentes judiciales, Rafael M. F., de 41 años y vecino de Grado, ratificó ante el juez la declaración que había hecho ante la Guardia Civil.

El conductor reconoció que "se puso nervioso" cuando se vio rodeado de una multitud al intentar atravesar el puente de Ribadesella y que, aunque tocó el claxon, la gente no se apartó. Su mujer, Rebeca Reyes, de nacionalidad venezolana, se puso también nerviosa y empezó a dar voces dentro del coche para que le sacara de allí.

Según el relato del conductor, la reacción de su mujer le alteró, al igual que la de la gente que rodeaba el coche, que empezó a mover el vehículo y a agredir a sus ocupantes. Rafael M. F. sintió "miedo" al verse acorralado e intentó salir de allí con el coche. Aceleró "un poco" y, aunque se dio cuenta de que había atropellado a alguien, prosiguió porque quería salir de allí "como fuese". El detenido dio positivo en el control de alcoholemia. La mayoría de los heridos -ninguno de ellos de gravedad- ha presentado denuncia contra él.