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Entrevista:ADLI DAANA | Secretario general de la International Palestinian Youth League | FÓRUM DE BARCELONA | La cita internacional de los jóvenes

"Los jóvenes palestinos se están convirtiendo en bombas humanas"

Adli Daana trabaja para la paz en una zona donde impera el conflicto. Arduo trabajo. Él es desde hace ocho años el secretario general de la International Palestinian Youth League (Liga Internacional de Jóvenes Palestinos), cuya sede está en la ciudad de Hebrón. La organización trabaja sobre todo con los niños de los territorios palestinos que se han visto abocados a la calle debido al ya casi perpetuo conflicto armado que vive la zona. Daana está estos días en Barcelona junto a una decena de miembros de la entidad para participar en el Festival Mundial de la Juventud que se celebra en el Fórum.

Pregunta. ¿Cuál es la situación de los jóvenes en Palestina?

Respuesta. Viven en la absoluta desesperación, alienación y confusión. Todo ello por culpa de las medidas de los israelíes contra los palestinos. Los jóvenes son un objetivo del Ejército israelí. En las cárceles israelíes hay 356 chicos menores de 18 años. Y, del total de presos palestinos (unos 10.000), la mayoría son jóvenes que tienen entre 18 y 35 años. Las restricciones de movilidad que aplica el Gobierno israelí también les afectan ya que no pueden ir a trabajar ni a visitar a su familia.

P. ¿La situación ha empeorado desde que el Gobierno de Sharon está construyendo el muro?

R. Psicológicamente es peor. Además, el Gobierno israelí tiene planes de encerrar a cada pueblo palestino en un muro, como si de una prisión se tratase. Todo ello causa traumas entre los jóvenes.

P. ¿Emigrar es una puerta de escape para estos chicos?

R. El paro afecta ya al 70% de los jóvenes. Los que terminan los estudios en la Universidad no encuentran trabajo, y los negocios locales no contratan porque les va mal. La economía no crece. Por todo ello, emigrar es una salida. Hicimos una encuesta y el 54% dijo que veía su futuro fuera de Palestina.

P. ¿La violencia sería otra consecuencia del conflicto? Vemos que muchos suicidas que se autoinmolan son jóvenes.

R. Así es. Hace dos años preguntamos a un grupo de unos 500 estudiantes de 14 a 18 años qué les gustaría ser de mayores, y el 74% expresó deseos relacionados con la muerte y la violencia. Es horroroso. Volvimos para preguntarles por qué tenían estos deseos y muchos nos contestaron que no podían evitarlo porque día tras día veían cómo mataban a sus vecinos, quemaban sus campos de cultivo y humillaban a sus padres.

P. ¿Qué hace su organización para ayudarles?

R. Lo que intentamos es sacarlos de la calle, pero nuestro trabajo es muy difícil. Hay tantas cosas que hacer que no bastaría ni con 1.000 organizaciones como la nuestra. Cada día hay más jóvenes que buscan trabajo y niños que dejan la escuela porque éstas tienen que cerrar debido al conflicto. La calle es la única salida. Entonces, cogen piedras y las tiran contra los tanques del Ejército. Lo que nosotros intentamos es que huyan de esta atmósfera de violencia, pero es muy complicado. ¿Cómo les hablas de paz, respeto y diversidad si lo único que ven es violencia? Los jóvenes palestinos se están convirtiendo en bombas humanas.

P. ¿Pero no cree que el problema también está en algunos sectores de la sociedad palestina, que se sienten orgullosos de los suicidas?

R. Le puedo asegurar que ninguna familia está orgullosa de que su hijo o hija se autoinmole. Lo que pasa es que los fundamentalistas van a visitarlas y les instan a que públicamente digan que se sienten muy orgullosas con las acciones de sus hijos o hijas. Pero lo que he visto es que las familias se quedan muy, muy tristes.

P. Y ante este panorama, ¿cómo se afronta el futuro?

R. No veo la luz al final del túnel. Llevo trabajando ocho años con movimientos pacifistas y es impresionante ver la energía que tienen estos jóvenes y cómo la malgastan. La única solución pasa por que Israel cumpla con las leyes. Que acate la decisión del Tribunal de La Haya y deje de construir el muro. Los cambios, sin embargo, no pueden venir sólo de fuera. Los palestinos deberíamos poder elegir a un nuevo líder, pero Israel no permite que haya elecciones.

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