El buen flamenco se adueña de Los Veranos de la Villa

Concluida la actividad musical del Cuartel del Conde Duque, a partir de esta semana son Los Jardines de Sabatini los que toman el relevo en la programación de Los Veranos de la Villa. Y lo hacen con el cante grande de figuras como Chano Lobato, José Menese, Pitingo, Pepe Luis Carmona o Duquende; el toque de Enrique de Melchor o Pepe Habichuela, y el baile de La Tati. Todo ello dentro de las Noches Flamencas que se avecinan.

Antonio Orozco canta esta semana en el límite de la provincia de Segovia, mientras que el municipio de Ciempozuelos inicia su primer festival de jazz.

- Flamenco en Sabatini. Con el majestuoso marco del palacio de Oriente como fondo de escenario, arranca el miércoles las Noches Flamencas en Sabatini, un programa que trae a Madrid, en concreto a los Veranos de la Villa, algunas de las figuras más granadas del flamenco actual.

El arranque se hace nada menos que con el cante sabio de un veterano de la talla de Chano Lobato, junto al de una figura en ciernes, Antonio Pitingo. Las guitarras de Paco Cortés y José Manuel León acompañarán con el toque sus respectivas y privilegiadas gargantas.

El jueves, el tocaor Enrique de Melchor ofrecerá un recital de guitarra con su trío para acompañar después solo los cantes del maestro José Menese. El viernes baila La Tati, otra veterana del arte flamenco, desde hace tiempo conocida como la bailaora de Madrid.

Al día siguiente la familia de origen granadino Carmona-Habichuela será la protagonista absoluta. Al toque estarán Pepe Habichuela y su hijo Josemi componente del recién desaparecido trío Ketama.

Nono y Juan Carmona Jr., hijo de otro Ketama, harán las percusiones, y todos ellos, acompañados de las teclas de José María Cortina y el bajo de Marcelo Fuentes, darán ritmo y compás al cante de Pepe Luis Carmona. Como artista invitada estará esa noche en el local Salomé Pavón, hija del gran pianista de flamenco Arturo Pavón.

Esta primera semana, con el flamenco en los Jardines de Sabatini, se cierra el domingo con Niño Josele, uno de los guitarristas de moda en el mundo flamenco. Una primera tanda en dúo solo de guitarra dará paso a que luego acompañe el cante de Duquende, otra de las grandes gargantas del arte jondo.

- Cruces de culturas. En sus años de estancia en España, el guitarrista brasileño Zezo Ribeiro ha adquirido ciertas sonoridades flamencas. Lo mostró ya hace unos años en el exquisito disco Flamencando, y lo ha corroborado recientemente con Brincadeira, su nuevo disco facturado junto al brasileño Chico César. En ese cruce de culturas musicales basa su propuesta, aunque esta semana, que la pasa entera en el Central, se muestra con un acompañamiento nada habitual.

Por primera vez le acompañará en Madrid la voz de su compatriota, la vocalista brasileña de São Paulo, Vanesa Borhagian. Ocasión única para comprobar ese galanteo amable y divertido que se intuye al enfrentar sus respectivos repertorios, todo ello anclado al implacable contrabajo del hispanobrasileño Juan Jaime Elyte.

El jazz de matiz latino también se escucha en Calle 54, merced a la presencia estos días del trombonista puertorriqueño Juan Pablo Torres y el piano del madrileño-neoyorquino Joshua Edelman. También se oirá ahí a la cantante de jazz Roberta Gambarini. El país carioca también centra la mirada del guitarrista Jayme Marques, que va a estar todos los lunes de agosto en la sala Clamores. La cantante Paloma Berganza recreará en ese mismo lugar clásicos de la canción francesa junto al pianista argentino Horacio Icasto.

La despedida brasileña de la semana la hace la agrupación de tambores Olodum, que ofrecerá en la Casa de Campo el recital que no pudo dar hace un par de semanas. De tambores también saben los venezolanos Huracán de Fuego, que en Clamores mostrarán las conexiones de las percusiones caribeñas con las africanas.

- Canción y mensaje. No sólo por el nombre, sino por actitud, Juan Sinmiedo es un tipo valiente que hace discos arriesgados.

El último se llama Mujeres sin miedo, y en él hace duetos con Cristina del Valle, Rossy de Palma, Mercedes Ferrer o Esmeralda Grao. Se pone del lado femenino para reivindicar sus derechos, en clave de poesía, buen gusto y sensibilidad, sin perder un compromiso crítico ante la injusticia. Lo presenta en la sala Galileo Galilei, por donde también se muestran esta semana nuevos talentos de la canción de autor como María Navidad, Marta de la Aldea o más veterano, como José María Alfaya o Antonio Toledo.

Queco, que con su reciente Tengo ha recuperado su protagonismo como cantante, olvidado en estos últimos años como productor de éxito -el Aserejé del trío cordobés Las Ketchup, hijas del cantaor y guitarrista Tomate, entre otros-, canta en el centro de ocio Opción, en el municipio de Alcorcón, mientras que en el límite de la provincia de Madrid, en El Espinar segoviano, lo hace Antonio Orozco, que sigue triunfante con su tercer disco, El principio del comienzo.

En la localidad de Ciempozuelos se inicia, asimismo, un festival de jazz y blues con vocación de perpetuarse con los años. Lo han llamado 100 Jazz, jugando con el nombre del pueblo, y se desarrollará en la plaza de La Constitución a lo largo de todos los domingos de agosto. El jazz clásico del trío de Alejandro Pérez pondrá las primeras notas al encuentro.