La 'máquina' Ullrich vuelve a carburar a tope a dos semanas del Tour
Antes de la contrarreloj decisiva de la Vuelta a Suiza -25,6 kilómetros en Lugano-, el líder, el helvético Fabian Jeker dijo que no tenía ilusiones: "Ullrich es una bestia. Ha estado subiendo todos los puertos con plato. No puedo hacer nada".
Efectivamente, desmintiendo todas las informaciones que le hacían gordo y bajo de forma, el corredor alemán que ganó el Tour de 1997 lució una potencia muscular tremenda -tanto entrenamiento de fuerza ha cubierto su objetivo- y se impuso en la prueba. Lo consiguió por delante de grandes rodadores -Cancellara, Bodrogi- y lo hizo aventajando a Jeker en 42s, el tiempo justo para ganar por 1s la ronda y para mostrar a Armstrong, Mayo, Hamilton, Heras y compañía que habrá que volver a contar con él en el Tour de 2004.
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