Detenido el segundo preso huido tras el asesinato de un policía en Barcelona

Agentes de homicidios del Cuerpo Nacional de Policía de Barcelona detuvieron ayer en la localidad valenciana de Manises a Antonio Jiménez Hernández, quien junto a Julio Navarro se fugó el 24 de mayo de los juzgados de El Prat (Barcelona) tras robar la pistola al agente que les custodiaba. En la huida, Navarro presuntamente mató al policía e hirió gravemente a un albañil. Jiménez, de 35 años, fue localizado en casa de un familiar después de dos semanas de búsqueda. Tres personas fueron detenidas en Manises por encubrirlo.

Los dos detenidos, que acababan de prestar declaración, no estaban esposados cuando supuestamente Navarro mató a Antonio D. F., un policía nacional de 25 años que trabajaba desde hacía poco en El Prat de Llobregat en tareas de refuerzo.

Julio Navarro, de 28 años, a quien la policía considera autor de los disparos que mataron al agente, fue detenido cuatro días después de los hechos en el barrio barcelonés de Sant Cosme, junto a su compañera sentimental, acusada de ayudarle en su fuga.

A Jiménez la policía le seguía la pista desde hacía días en las ciudades de Barcelona y Valencia, donde el acusado tiene familia. Al detenido se le imputan los delitos de quebrantamiento de condena, atentado con resultado de muerte y lesiones graves.

Fuentes policiales informaron de que en la operación participaron diferentes unidades policiales de Valencia y Barcelona. La detención del sospechoso se produjo finalmente a la altura del número 6 de la calle Santos Justo y Pastor, en el límite de la localidad de Manises con el aeropuerto de Valencia.

Tras el registro del domicilio, la policía sigue sin hallar la pistola que los fugitivos arrebataron al agente que los custodiaba y con la que le dispararon. Dos hombres y una mujer fueron detenidos ayer por la tarde en Manises por encubrir al fugitivo.

Jiménez ha sido detenido en 16 ocasiones por atracos y tenía pendientes tres reclamaciones judiciales. En 1987 cometió un asesinato por el que ya cumplió condena.

Su compañero en la huida, Navarro, también delincuente habitual, había sido detenido en treinta ocasiones por delitos contra la propiedad y antes de su fuga tenía pendientes ocho órdenes de búsqueda y captura, pero hasta el pasado 24 de mayo no tenía delitos de sangre.

El albañil herido de bala en el cuello durante el tiroteo en los juzgados de El Prat ha sido dado de alta recientemente.