Herido un legionario en el primer ataque contra los convoyes que se retiran de Irak

La advertencia de que la retirada de las tropas de Irak es una "operación de combate y alto riesgo" se vio ayer confirmada por los hechos. Por primera vez desde que se inició el repliegue hacia Kuwait, el pasado 2 de mayo, un convoy fue objeto de una emboscada. En el enfrentamiento, que se produjo sobre las 9.30 (dos horas menos en la España peninsular) en las proximidades de Al Hamza, unos 50 kilómetros al sur de Diwaniya, fue herido leve el sargento primero de la Legión Francisco Javier Cubero Mellado. Un iraquí resultó muerto, otro herido grave y un tercero detenido.

El sargento primero, de 31 años, perteneciente a la X bandera de la Legión con base en Ronda (Málaga), se reincorporó ayer mismo a su unidad, tras ser curado de heridas de metralla en la pierna izquierda en el escalón médico del Ejército español. Por su parte, el iraquí herido de gravedad fue atendido en el hospital de campaña de EE UU en Diwaniya y evacuado luego a Bagdad, mientras que el detenido fue entregado a las tropas estadounidenses.

La emboscada se produjo cuando el Blindado Medio sobre Ruedas (BMR) en el que viajaba el sargento primero volvía a Base España tras haber dado protección a un convoy logístico que se trasladó ayer a Kuwait.

Según informó el Ministerio de Defensa, los agresores atacaron con lanzagranadas RPG-7, ametralladoras y fusiles y los españoles les respondieron con fuego de ametralladoras y fusilería. Aunque Defensa no precisó el número de atacantes ni su filiación, ya que la investigación corresponde ya a las tropas de EE UU, fuentes militares españolas se mostraron convencidas de que pertenecían al llamado Ejército del Mahdi, que dirige el clérigo radical chií Múqtada Al Sáder.

El de ayer era el séptimo de la decena de convoyes programados para el repliegue a Kuwait de las tropas españolas, que se inició el pasado día 2. El procedimiento habitual consiste en que los camiones y góndolas de transporte de material sean escoltados por dos secciones del Grupo Táctico de la Legión, dotado de blindados BMR equipados con ametralladoras de calibre 12.70.

100 kilómetros peligrosos

Además de la escolta móvil, que acompaña a los convoyes hasta Kuwait, durante su tránsito por la zona considerada más peligrosa, que se extiende unos 100 kilómetros al sur de Diwaniya, se establece un dispositivo disuasorio de seguridad en el que participan dos secciones del Escalón Ligero de Caballería, dotado de blindados VEC con cañones de 25 milímetros, junto a otra docena de vehículos, incluidos BMR.

Precisamente, el BMR en el que viajaba el sargento primero fue atacado cuando volvía a Diwaniya, tras haber participado en el dispositivo de seguridad del convoy, que ni siquiera llegó a percatarse del incidente. La emboscada tuvo lugar en las proximidades de la aldea de Al Hamza, una de las más conflictivas, pues a la presencia de insurgentes hay que sumar la de delincuentes armados. Fue en esta población donde, el pasado 22 de enero, recibió un disparo mortal en la cabeza el comandante de la Guardia Civil Gonzalo Pérez García, durante una operación contra una banda mafiosa.

El pasado 25 de abril, una patrulla española repelió un ataque en Diwaniya, matando a dos iraquíes, y al día siguiente se produjo un nuevo enfrentamiento, esta vez con un saldo de siete iraquíes muertos. Ambos incidentes, los últimos de gravedad hasta ayer, se produjeron antes de que comenzara la operación de repliegue, ordenada por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero tras asumir el cargo.

El pasado 3 de mayo se retiró el contingente dominicano y el día 12 lo hicieron los militares hondureños que, con españoles y salvadoreños (los únicos que por el momento seguirán en Irak), integraban la brigada multinacional Plus Ultra. Los primeros 144 españoles del Contingente de Apoyo al Repliegue volvieron a Almería el pasado viernes.

En Diwaniya, bajo control operativo de un Regimiento de Caballería del Ejército de EE UU desde el 16 de mayo, quedan medio millar de militares españoles. La retirada está casi concluida, sólo faltan por realizar un par de convoyes a Kuwait, pero la parte que queda pendiente, precisamente por ser la última, se considera la más delicada.

El presidente del Gobierno anunció en el pleno Congreso que las tropas españolas estarían de regreso antes del próximo día 27. Al ritmo actual, la operación podría culminarse al final de esta semana, pero fuentes de Defensa indicaron que hay que extremar las medidas de seguridad por encima de cualquier consideración de calendario, especialmente a la vista del incidente de ayer.

"Cruzo los dedos, parece que no es más que eso", exclamó el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, cuando fue informado de que un legionario había resultado herido leve en una emboscada. El jefe de la diplomacia española agregó que el incidente demuestra "que la situación en Irak es extremadamente confusa, difícil y poco segura".

"Espero que el retorno de nuestras tropas pueda llevarse a cabo en el mejor de los tiempos y con la mayor seguridad", concluyó, según informa Efe.