Con mucho futuro

Nacidos al calor del mestizaje musical de la década pasada, este quinteto madrileño, forjado en la Facultad de Filosofía, se muestra inasequible al desaliento después de dos excelentes discos que quizá no tuvieran el eco que merecían. Ahora optan por la autoedición -acaban de sacar el álbum Daquipayá- y por el directo, que es su mayor atractivo. En la presentación del disco en Madrid el grupo se hizo acompañar por las voces de la extremeña Bebe y Taera Shaik, las palmas y el adorable baile de Celia Ramos y Patricia Sánchez y las guitarras de Juan Martín, líder de El Tío Calambres, y Fernando Polaino, productor del disco. El concierto fue una auténtica delicia en la que demostraron que, sin ser los mejores instrumentistas del mundo, la banda sabe sacarse como colectivo el mejor partido posible. Y ese partido es mucho si se atiende a extraordinarias canciones como Barquita o la emocionante Con cuatro duros que, si estuviera el horno para bollos, les colocarían ya a la misma altura que La Cabra Mecánica, grupo que podría ser perfectamente uno de sus mentores.