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POESÍA

Por una muerte

Uno se muere así, cuando tenía

un cigarro en la mano (que aparece

humeando, después, sobre el asfalto),

cuando había una letra pendiente, un libro abierto,

un cuento a medias (que los niños nunca

sabrán cómo termina);

uno se muere así, de golpe, abandonando

su ropa en el armario y sus asuntos

y su reloj parado en una hora

-la de la muerte en punto- (o sin pararse

y entonces es más triste todavía

porque la ves seguir, infiel al amo),

y a lo mejor aún llega alguna carta

con las señas del muerto

y hace llorar de puro no saber...

Después de morir uno, mientras uno

está muriendo, se abre

una ferretería, pintan una fachada

y el muerto ya es ajeno y todo nos lo aleja.

Las yerbas del olvido

empiezan a crecer sobre su tumba.

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Versos para el 11 de marzo

Miguel d'Ors (Santiago de Compostela, 1946) es autor de Hacia otra luz más pura (Renacimiento). En 1987 obtuvo el Premio de la Crítica.

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