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Los operadores y guías turísticos asisten a cursillos sobre cómo programar excursiones al recinto

Lluís Pellicer

El tiempo dio ayer una tregua a los 7.000 escolares que visitaron el Fórum y, salvo el cierre de algún pequeño espacio, no hubo ningún problema para seguir con las actividades programadas. La meteorología también permitió que algunos turistas que pasan sus vacaciones en Barcelona se decidieran a acudir al recinto, pese a que aún no han llegado los primeros grupos por operador. Hasta entonces, la organización del Fórum ofrece cursos para que los profesionales del sector puedan explicar los contenidos del evento y planificar sus propias excursiones.

Hasta el mes de julio, el área de Turismo del Fórum calcula que más de 7.000 personas del sector participarán en estas jornadas de formación. Los asistentes son sobre todo guías, recepcionistas, hoteleros, relaciones públicas, propietarios de agencias de viajes, concejales de municipios costeros y grandes operadores europeos. Hasta hoy, han pasado por el Fórum los profesionales de los consorcios de turismo de Cataluña, Barcelona y Santa Susanna (Maresme), guías turísticos de los países nórdicos y el operador alemán TUI.

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Las reuniones de trabajo empiezan con una explicación sobre los contenidos y el espíritu del Fórum, continúan con un vídeo y finalmente se efectúa un recorrido por los principales espacios del recinto. "Con estos cursos queremos que cada grupo pueda organizar sus propias excursiones y que sea capaz de adaptarlas a sus conveniencias y, en especial, al perfil de sus clientes", explicó la responsable de Turismo del Fórum, Núria Franquet.

Más puntos de venta

A través de un acuerdo suscrito por el Fórum y varios municipios y gremios de hostelería, 750 establecimientos turísticos catalanes pasarán a ser puntos de información y de venta de entradas para el evento. Además, varias agencias de viajes adquirieron en su día una media de 2.500 pases. Ello supone la multiplicación de establecimientos donde los turistas podrán comprar sus entradas, por lo que la organización está procurando que cada uno de ellos pueda conocer los contenidos concretos del Fórum, así como las rutas que puede ofrecer. "El Fórum es muy grande y uno puede casi desbordarse si intenta verlo todo por sí mismo. Los guías turísticos que vengan deben tener claro qué les ofrecemos para que puedan ofrecer explicaciones sin depender del personal del evento", añadió Franquet.

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Ayer la lengua de Dante se oía en el recinto. Después del Reino Unido, Italia es el segundo país del que llegan más turistas a Barcelona. En 2003, visitaron la ciudad unos 369.000 italianos, y se espera que este año la cifra aumente. Carlo y Silvia, cuando lleguen a Italia, van a recomendar la visita al Fórum. "Creemos que es muy buena idea transmitir valores como la diversidad cultural y el respeto al medio ambiente. Y aunque en los primeros días siempre se deben hacer algunos ajustes, esto luego funcionará mejor", señala Silvia.

Aún falta, sin embargo, conocer cuál es la acogida que han tenido los paquetes turísticos del Fórum entre los clientes de los grandes operadores turísticos. Éstos aún no quieren dar datos sobre la repercusión que puede tener la cita, aunque el mayorista más grande de Europa, TUI, ya ha señalado que la demanda de viajes a Barcelona ha aumentado de forma "muy considerable". No obstante, los profesionales del sector no quieren dejarse llevar por la euforia. "Algunos vendrán exclusivamente por el Fórum, pero la mayoría será gente que vendrá a ver Barcelona y, de paso, lo visitará", señaló el vicepresidente del área receptiva de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes, Pere Aliguer, quien prefiere esperar a que el Fórum arranque de forma definitiva para hacer las primeras evaluaciones desde una perspectiva turística.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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