_
_
_
_

El sucesor de Sergi

El Barça halla en Van Bronckhorst el lateral izquierdo tan buscado

Cuando Frank [Rijkaard] me llamó el pasado verano para saber si era posible que jugara en el Barça, no me lo pensé dos veces. Ahora confío en seguir en el Camp Nou". Giovanni van Bronckhorst (Rotterdam, Holanda; 1975) expresa en un correcto castellano su integración en el club a punto de viajar a Vigo, donde los azulgrana intentarán prolongar hoy su racha de 17 partidos invictos.

Van Bronckhorst ya conocía la metodología de Rijkaard desde la Eurocopa 2000, en la que Holanda alcanzó las semifinales con él como seleccionador, de manera que no le ha sido difícil adaptarse a sus esquemas. Procedente del Arsenal, el lateral llegó cedido al Barça tres días antes de iniciarse la Liga y se ofreció para debutar ante el Athletic pese a llevar sólo dos entrenamientos.

Desde su estreno, Van Bronckhorst ha sido el propietario del lateral izquierdo, un puesto que quedó huérfano en el Camp Nou desde la marcha de Sergi. Bogarde, Zenden, Frank de Boer, Coco, Sorin, Motta y Navarro habían desfilado sin demasiado éxito por ese ala. En cambio, Gio, que así es como le llaman en el vestuario, se ha ganado la confianza de todos los estamentos del club: es el jugador que más minutos acumula -sólo se ha perdido cuatro de los 35 partidos de Liga disputados- después de Cocu y Xavi, la directiva negocia con el Arsenal su fichaje definitivo por dos temporadas y la afición le recompensó el pasado domingo con una cálida ovación después de que lograra marcar, ante el Espanyol, su primer gol.

Txiki Begiristain, el secretario técnico del Barça, lo califica como "un especialista de la banda izquierda, con facilidad para llegar a la línea de fondo y poder realizador". Sus compatriotas azulgrana abundan en que le pega con ambas piernas y en que, siendo un lateral reconvertido -fue volante ofensivo-, defiende bien. Cocu le compara con Roberto Carlos y Cafú: "Sin tener su poder físico y su velocidad, es un jugador muy inteligente. Un gran táctico".

Persona de trato afable, la llegada de Davids en enero resultó vital para que mejorara su ubicación en el campo. "Ha sido crucial", relata Gio; "durante la primera vuelta había una distancia enorme entre mi posición y la de Ronaldinho. Yo subía con dificultad, me atascaba en la divisoria. Con Davids todo cambió. Ya nos conocíamos y he podido exhibir mi potencial como carrilero ofensivo. Con él, la banda izquierda respira, hay más libertad". Y añade: "Mi gol contra el Espanyol expresa mi buen momento. Me supo a gloria. Recuperé el sabor de mis tiempos como centrocampista en el Feyenoord [de 1993 a 1998] y en el Glasgow Rangers [de 1998 a 2001]".

Arsène Wenger lo recicló después como lateral zurdo en el Arsenal. "Perdí poder ofensivo, pero aprendí a defender. Hasta que me lesioné en una rodilla y estuve diez meses de baja".

A Gio le encanta Barcelona y el jamón de jabugo y ya ha matriculado a su hijo, de dos años, en el colegio inglés St. Peters School de St. Just Desvern.

Van Bronckhorst.
Van Bronckhorst.EFE

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_