Camps y Valcárcel rechazan el PHN alternativo de Narbona

Narbona recibió por separado a los dirigentes valenciano y murciano y les dejó claro que la transferencia del Ebro no se hará "por su falta de viabilidad económico-financiera". "Al igual que no había armas de destrucción masiva que justificaran la guerra en Irak, tampoco existía la panacea del trasvase del Ebro", dijo Narbona. La ministra aseguró que el coste medio real del agua para el usuario sería de 0,91 euros, frente a los 0,39 previstos por el PHN, un precio "inviable" para la agricultura. El trasvase, además, no podría aportar las cantidades de agua previstas. La ministra sostiene que de los 1.050 hectómetros cúbicos prometidos sólo llegarían 620 a Cataluña, Valencia, Murcia y Almería.

A partir de este análisis, ofreció a los presidentes autonómicos un "paquete de medidas urgentes" a ejecutar en esta legislatura. En ambos casos, el ministerio combina la desalación, especialmente en las zonas más deficitarias de Alicante y Murcia, con la mejora de la gestión del agua, modernización de regadíos y reutilización de aguas depuradas, y la creación de centros de intercambio de derechos del agua. Un estudio más detallado decidirá en un año si son necesarias actuaciones complementarias.

La ministra anunció a Camps que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "hablará" con él antes de aprobar la derogación del trasvase.En la Comunidad Valenciana, Narbona, que no prevé de momento trasvases, lanzará inversiones por 990 millones de euros para disponer de 340 hectómetros cúbicos, de los cuales 240 corresponderían a la cuenca del Júcar y los 100 restantes a la del Segura, según la documentación entregada por el ministerio. El trasvase del Ebro calculaba dejar en el Júcar un total de 315 hectómetros, dato que destacó Narbona. En los documentos de la Región de Murcia, el ministerio prevé actuaciones por 1.219 millones de euros en la cuenca del Segura, en la que engloba tanto a la zona murciana como también actuaciones en parte de Alicante. Los hectómetros cúbicos a reunir con las medidas previstas en este caso en Murcia y Alicante sumarían 294. El PHN, por contra, adjudicaba a la cuenca del Segura un total de 450 hectómetros cúbicos, inferior a lo comprometido por Narbona, que argumentó que la cifra real a trasvasar a esa cuenca no hubiera superado los 266 hectómetros cúbicos. Fuentes del ministerio no pudieron aclarar ayer qué inversiones y cantidades de agua corresponden finalmente a la Comunidad Valenciana y cuáles a la Región de Murcia.

"No hay alternativa al trasvase del Ebro", respondió tajante tras la reunión Francisco Camps, quien subrayó que la paralización de la obra supondría "una agresión". Según Camps, "buena parte" de las obras "ya están los anexos del PHN", algunas incluso en ejecución -Narbona criticó que el PP tuvo años para hacerlas-, y con presupuestos similares, por lo que el documento "no supone una alternativa, no soluciona ni mucho menos el problema del agua" de los valencianos y en otras autonomías afectadas. Sólo implicaría "inversiones complementarias". Camps reiteró que defenderá el trasvase en los tribunales "hasta las últimas consecuencias". Fuentes del Consell subrayaron que las medidas de Narbona "sólo son una pequeña parte del anexo del PHN", con el "regalo" de una o dos desaladoras. Las mismas fuentes calificaron la propuesta, en un primer repaso, de "poco seria". El Consell también rechaza el cálculo del precio del agua de Narbona y mantiene que creer sus números es "un acto de fe". En relación con los bancos del agua, resalta que sólo tienen sentido si participa una cuenca excedentaria.

El presidente de Murcia, Ramón Valcárcel, se mostró "decepcionado" porque la alternativa no supone "una solución definitiva ni suficiente" para la Región. Valcárcel aceptó las desaladoras sólo "como complemento a un trasvase" y también pidió entrevistarse con Zapatero.

Narbona visitará el lunes Bruselas con el fin de evitar que se pierdan las ayudas ya pedidas para el PHN y prevé presentar dentro de tres o cuatro semanas el decreto-ley de derogación del trasvase del Ebro y de actuaciones urgentes de su alternativa. El caso del trasvase Júcar-Vinalopó, la ministra dijo que se estudiará "con detenimiento". Mientras, el gobierno catalán, que también se entrevistará con Narbona (al igual que Andalucía), adelantó ayer que renuncia "por falta de consenso" al Ramal Norte del trasvase para el área metropolitana de Barcelona, informa Oriol Aymí.

La ministra anunció también ayer que hoy propondrá al Consejo de Ministros el cese de José Carlos Jiménez de la presidencia de la Confederación Hidrográfica del Duero, un cese acelerado tras su "lamentable comportamiento" al anunciar que agilizaría obras antes de dejar el cargo. Jaime Palop, ex director general andaluz de Obras Públicas de Andalucía, presidirá la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, y José Salvador Fuentes del Segura, donde sustituye a Juan Cánovas, cuestionado por las investigaciones en torno a un mercado negro del agua. El ex alcalde de Guardamar, Manuel Aldeguer, será el comisario de Aguas del Segura, informa Tono Calleja.