Apatía en la Bolsa española

El mercado de valores español se ha visto afectado con fuerza en esta semana por la posibilidad de una próxima subida de los tipos de interés en Estados Unidos. El Ibex 35 terminó anotándose un descenso del 0,67%, frente a subidas del 1,60% en París y del 1,73% en Francfort.

La Bolsa española ha dejado en estos últimos días de compartir expectativas con el resto de los mercados europeos, hasta el punto de que el Ibex 35, el principal índice de este mercado, ha caído el 0,67% frente a subidas del 1,73% en Francfort y del 1,60% en París.

Esa apatía de los inversores españoles ha conseguido que la posible subida de los tipos de interés en Estados Unidos haya tenido más peso en esta Bolsa que en Wall Street. En cada una de las sesiones, la Bolsa española ha encontrado problemas para mantener el ritmo de los demás mercados, sin que los observadores pudieran aportar explicaciones convincentes a esta situación. Los factores negativos han afectado más a las cotizaciones españolas, mientras que los datos positivos han tenido efectos mucho menores. Con todo, dentro del mercado se ha producido una especie de proceso de selección que dificulta aún más la búsqueda de una justificación suficiente.

Los volúmenes negociados han sido en general bastante bajos, pero no muy diferentes a los del resto del ejercicio, con lo que no es la falta de presión del dinero la causa directa de la desgana con que se han movido muchos precios. En ocasiones se han recordado los posibles cambios en la regulación de algunos sectores productivos tras el cambio de Gobierno, pero aún no hay pormenores al respecto y tampoco se espera que sean inmediatos ni demasiado traumáticos.

Los movimientos de las grandes carteras, con numerosas operaciones de lavado de cupón o de traspaso de títulos, tampoco suelen ser causa de preocupación para los inversores de a pie ni interfieren en el desarrollo de los precios, por lo que, a pesar de alcanzar volúmenes importantes, tampoco han sido la causa de la abstención de muchos inversores, cuya actitud tampoco se ha traducido abiertamente en posiciones vendedoras claras.

En conjunto, la debilidad hay que achacarla a los grandes valores, entre los que sólo Endesa termina esta semana repitiendo su precio, con recortes en el resto. El sector de comunicaciones, por el contrario, ha sido uno de los más animados debido al revulsivo que está suponiendo la próxima entrada en el mercado de Tele 5 y por la esperada reactivación en el mercado de la publicidad.

La mayor animación se ha dado entre los valores de segunda fila, como demuestra el menor descenso semanal del índice general de la Bolsa de Madrid, que recoge más de un centenar de valores y ofrece, por tanto, una radiografía más amplia del mercado. Este índice cedió sólo el 0,49% en la semana.