Arenas defiende los debates internos "con todas las consecuencias" si no favorecen al PSOE

El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, se mostró ayer partidario de celebrar debates internos en su partido "con todas las consecuencias", siempre y cuando no salgan al exterior "para favorecer al PSOE". En su ronda de visitas por las provincias andaluzas, Arenas visitó ayer Almería donde el PP celebró una Junta Directiva en la que marcó la estrategia a seguir en la oposición. Arenas ironizó sobre el talante del presidente de la Junta, Manuel Chaves, y del que será su nuevo Ejecutivo: "Es más de lo mismo, como el propio Chaves. Ni frío ni calor, cero grados".

Arenas arrancará hoy en Almería, con el Plan Hidrológico Nacional como bandera, su oposición al nuevo Gobierno andaluz. Arenas mantendrá una reunión con los presidentes de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y Valencia, Francisco Camps, comunidades que junto a la provincia de Almería son las más afectadas por la suspensión del trasvase del Ebro que ha anunciado el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

La reunión, que se ha denominado Encuentro por el Agua, será al mediodía en la entidad local de Balanegra (Berja), donde Arenas ofrecerá el primer mitin de cara a las elecciones europeas de junio. "No se puede permitir que se esté jugando con el futuro de Almería", dijo ayer Arenas.

Entre los retos inmediatos planteó la necesidad de ganar los comicios europeos y las elecciones municipales de 2007. "Si queremos ganar las generales hay que ganar las municipales", advirtió. Y para conseguirlo anunció que peinará todos los municipios de Almería y que cada mes y medio visitará todas las provincias andaluzas.

Congresos de compromiso

De entrada, Arenas se ha propuesto que en los próximos congresos provinciales del partido que se han de celebrar el próximo otoño exista un único candidato. "Voy a intentar que sean ocho congresos de compromiso. Estaré al lado de quien quiera sumar y en contra de quien quiera restar", dijo.

Pese a que se mostró partidario de los debates internos, Arenas hizo advertencias sobre las futuras decisiones. "Hablaremos todo lo que tengamos que hablar pero lo que acordemos tendrá que ir a misa hasta el año 2007 y 2008", indicó.

En su agenda política, Javier Arenas ha marcado reunirse con los alcaldes del PP en Andalucía cada dos meses. "A ellos les debemos un monumento. Los 150 que tenemos son la referencia del PP en España", dijo. El líder de los populares andaluces describió también el "problema" de las zonas rurales de la región donde la velocidad política es "distinta", y anunció un vuelco de su partido hacia el mundo rural. Igualmente, apuntó el reto de ensanchar la base social del partido. "Hay que explicarles a los jóvenes que los que están llevan 20 años en el poder", dijo.

Los populares también se han marcado como objetivo ser "la voz" de todo tipo de organizaciones sociales en el Parlamento andaluz. "Nos vamos a especializar el plataformas. Nos vamos a poner al frente de cualquier manifestación. Más vale tarde que nunca. No estoy dispuesto a aceptar que el que sea del PP sea un mal andaluz", remachó.

Arenas exigió a su partido que reivindique la gestión de los gobiernos de José María Aznar. "Cada vez que venga alguien a Almería a inaugurar una obra consignada y pagada por los gobiernos del PP, si en nuestra sede hay tres pesetas hay que poner un anuncio en los periódicos diciendo que esa obra se consignó y se presupuestó con los gobiernos de José María Aznar", aseveró.

Arenas defendió la necesidad de llegar al pleno empleo en la comunidad; la reforma del Estatuto de Autonomía "siempre en el marco de la España común y para utilidad de los ciudadanos"; la educación en libertad y un cambio "a fondo" de las Administración andaluza que otorgue más competencias y financiación a los ayuntamientos.