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Reportaje:BALONCESTO | Copa de la ULEB: final / Liga ACB

La hora de Bueno

El rendimiento de quien fuera 'júnior de oro', clave para que el Madrid dispute un título europeo

"No renuncio a jugar con Gasol en la NBA. No me considero inferior a nadie". Quien dice esto es Antonio Bueno, madrileño de 23 años y, sorpresa, suplente del Real Madrid de baloncesto que disputará mañana martes (La 2, 20.30), en la ciudad belga de Charleroi, la final de la Copa de la ULEB contra el Hapoel Migdal, de Jerusalén.

La declaración de intenciones de Bueno, formado en la cantera blanca y compañero del propio Gasol en la selección nacional júnior que conquistó el oro en el Campeonato del Mundo de Lisboa, en 1999, tiene mucho que ver con el grado de confianza en sí mismos que destilan los puntales de una generación que ha cambiado la historia del baloncesto español.

Son, además de Gasol, los Raúl López, Juan Carlos Navarro o Felipe Reyes, todos ellos piezas maestras de la selección absoluta que se presentará en los Juegos Olímpicos de Atenas como firme candidata a una medalla tras la de plata alcanzada en el último Campeonato de Europa, disputado en Suecia el pasado verano.

"El Hapoel es inferior a nosotros, pero siempre puede tener su día y fastidiarnos"
"No renuncio a jugar en la NBA, con Gasol, dentro de un tiempo. No me veo inferior a nadie"
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Un 'derby' de verdad

Bueno también participó en aquel éxito, como lo hizo en la conquista del Europeo júnior de 1998, y confía en repetir la experiencia en Grecia. "Espero que Moncho López [el seleccionador nacional] me vuelva a llamar. Estoy mejor que nunca", dice después de recordar los tiempos en que las conversaciones con sus compañeros de promoción giraban alrededor del mismo sueño: "Siempre decíamos: 'Tío, imagínate si nos juntamos todos en la absoluta', y mírenos ahora. Esta generación es algo absolutamente excepcional".

Como casi siempre en el deporte profesional, la clave es más cuestión mental que cuestión de una calidad que se da por supuesta. De hecho, "siempre hay que aspirar al máximo", la frase preferida de Bueno, podría ser suscrita por cualquiera de los júniors de oro.

"Físicamente, no me veo inferior a nadie", insiste desde sus 208 centímetros, acompañados por 111 kilos, "y noto como cada año progreso como jugador", continúa; "mi objetivo inmediato es ser titular en el Madrid. Luego, pelearme con Reyes y Gasol por un puesto en el quinteto de la selección. Y después, la NBA. Puede sonar un poco fuerte que esto lo diga alguien que juega menos de 15 minutos por partido en la Liga ACB, pero... ¿por qué no?".

Bueno no será, de momento, titular en el Madrid, pero sí fue quien tumbó a Estudiantes en las semifinales de la Copa de la ULEB. Autor de 27 puntos en el partido de ida, en cancha ajena, y sostén del juego interior en el de vuelta ante los problemas por las faltas personales de Kambala, su movimiento de espaldas al aro, sus ganchos y su facilidad para anotar desde los cuatro metros podrían volver a ser el arma oculta de los blancos en una final que ha estado a punto de no disputar.

Sancionado con un partido de suspensión después de una confusa jugada con Patterson, de Estudiantes, en la que éste acabó expulsado tras soltar un puñetazo a Bueno, un recurso de última hora del Madrid le permitirá saltar a la pista el martes. "Estamos bien y con ganas de lograr un título que hace mucha falta a la sección. Pero, aunque sea peor que nosotros, el Hapoel siempre puede tener un día inspirado y fastidiarnos. No va a ser nada fácil", pronostica.

Tampoco ha sido sencilla la trayectoria profesional de Bueno. Debutó en 1999, con sólo 18 años, en la Liga ACB, pero luego fue cedido por el Madrid de un equipo a otro -ha jugado en el Ourense, el Fuenlabrada y, dos temporadas, en el Joventut, siempre como suplente salvo el curso pasado-, carrusel que al menos le sirvió para "madurar" y alejarse del desastre vivido en las dos últimas temporadas.

"He tenido un camino diferente al de Gasol y compañía y las lesiones tampoco me han ayudado demasiado, ni siquiera este año. De todas formas, lo importante es cómo se acabe y yo voy de menos a más. Tal vez por fin me haya llegado la hora de ser importante", concluye.

Bueno trata de eludir a Iturbe en un Madrid-Estudiantes.
Bueno trata de eludir a Iturbe en un Madrid-Estudiantes.EFE

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