El cine homenajea a Picazo en el 40 aniversario del estreno de 'La tía Tula'

El cineasta Miguel Picazo se reencontró ayer con sus orígenes en el emotivo homenaje que le rindieron las gentes del séptimo arte en su pueblo, Cazorla (Jaén). Coincidiendo con su 77 cumpleaños, Picazo volvió al Teatro de la Merced, donde se aficionó al cine y se proyectó la película que marcó su carrera, La tía Tula, de la que se cumplen 40 años de su estreno. Estuvo arropado por algunos de los actores con los que ha trabajado como Aurora Bautista, Assumpta Serna o Emilio Gutiérrez Caba.

Miguel Picazo recibió ayer la Medalla de Oro de Cazorla y hoy se le entregará la de la vecina localidad de Peal de Becerro, donde también se descubrirá una escultura en la calle que lleva su nombre. Entre ambos municipios de la sierra de Cazorla transcurrió su infancia hasta que, cumplidos los 11 años, su familia se desplazó a Guadalajara, ciudad de la que es hijo adoptivo y donde rodó La tía Tula, el largometraje con el que se dio a conocer y que está considerada una pieza clave dentro del nuevo cine español.

Al homenaje de estas dos localidades se ha unido la Diputación de Jaén, que ha querido saldar la deuda que tenía con uno de los jiennenses más ilustres. Durante toda la semana, la Diputación ha exhibido de forma totalmente gratuita todas las películas dirigidas por Miguel Picazo a lo largo de su carrera.

"Su vida ha sido digna de una película y reflejo fiel del acontecer de nuestro país durante el pasado siglo", destacó el presidente de la Diputación, Felipe López.

"Es como volver a vivir otra vez", declaró emocionado Miguel Picazo el viernes en Jaén, donde volvió a proyectarse otra de sus cintas más famosas, Extramuros. "Un homenaje así es como una inyección que te pone la moral muy alta", añadió Picazo, que recuerda en el libro editado por la Diputación cómo su pasión por el cine la adquirió en el "destartalado y frío" teatro de La Merced de Cazorla en los años previos a la Guerra Civil.

Las primeras películas que estimularon su fantasía fueron El expreso de Shanghai, La viuda alegre, El desfile del amor o La hija del penal, del jiennense Eduardo García Maroto. Cuenta también en el libro, a modo de anécdota, que cuando la película era rotulada él los leía en voz alta y a su alrededor se juntaban grupos de espectadores analfabetos.

Ayer se dieron cita en Cazorla muchos de los que han trabajado con Picazo como Aurora Bautista, protagonista de La tía Tula y Extramuros, y Assumpta Serna, además de otros actores, directores y críticos, como Emilio Gutiérrez Caba, Antonio del Real, Antonio Drove, Angelino Fons, Miguel Marías y Jesús Cobos.

Miguel Picazo también ha participado como actor en películas como Tesis (1996), Remando al viento (1987), El Libro del buen amor (1975) y El espíritu de la colmena (1973). Ocasionalmente ha realizado trabajos para la televisión, ha sido director del guión de Oscuros sueños de agosto, de Víctor Erice, y ha dirigido la obra de Carmen Martín Gaite Entre visillos.

Otros cineastas que no pudieron asistir al homenaje, como José Luis Borau, Luis García Berlanga, Antonio Giménez-Rico o Carlos Saura han dejado su testimonio en el libro editado por la Diputación.