29 rusos mueren en una explosión de gas debida al robo de tuberías

Una fuerte explosión se produjo ayer en Arjánguelsk, al noroeste de Rusia, en un bloque de viviendas que quedó parcialmente destruido. Cuarenta y dos apartamentos se vieron reducidos a ruinas y se calcula que sepultaron a más de 80 personas. Los socorristas durante el día de ayer lograron sacar a la superficie a 24 personas con vida y a 29 cadáveres. La policía concluyó que la tragedia fue por un escape de gas.

Las labores de rescate debían continuar durante la noche en la avenida de los Cosmonautas Soviéticos, número 120, de Arjánguelsk con perros especialmente adiestrados para encontrar a las personas que aún puedan quedar bajo el amasijo de hormigón y hierro al que quedó reducido uno de los portales del edificio de nueve plantas. No se sabe exactamente cuántas de las personas que están registradas en el portal destruido se encontraban en casa, pero los socorristas calculan que puede haber todavía una veintena bajo las ruinas.

Desde que unos terroristas volaron dos edificios de vivienda en Moscú en septiembre de 1999, siempre que se produce una explosión en una casa la gente y la policía piensan en primer lugar que puede tratarse de un nuevo atentado sangriento. Pero después de inspeccionar minuciosamente el lugar de los hechos, los expertos dictaminaron que se trató de una explosión de gas. Sin embargo, el escape aparentemente no se debió a un desperfecto técnico, sino a dos vagabundos que, según se cree, robaron las llaves de paso de las tuberías. Este hecho habría provocado que el gas se concentrara en el sótano y finalmente estallara.

Natalia Ozhíguina, portavoz del directorio del Servicio Federal de Seguridad de la provincia de Arjánguelsk, explicó que ya habían distribuido retratos robot de los sospechosos, dos hombres mal vestidos de entre 35 y 40 años de edad. Ozhíguina agregó que la tragedia se podría haber repetido en varios otros edificios, como lo han demostrado las inspecciones que se llevaron ayer a cabo después de la explosión: en varias casas vecinas descubrieron escapes de gas por el mismo motivo. En Rusia suele ser bastante común que vagabundos y gente de escasos recursos roben piezas metálicas para venderlos después como chatarra.

Para participar en las labores de rescate, que se vieron dificultadas por un incendio que se desató bajo los escombros, no sólo se movilizó a todos los equipos de socorristas de la provincia, sino también a grupos procedentes de Moscú y de San Petersburgo. Desde esta última ciudad viajaron 30 socorristas en un helicóptero Mi-8, y desde la capital rusa, un avión de transporte llevó a 76 hombres con perros adiestrados para hallar cuerpos.

El portal vecino también sufrió daños y las autoridades decidieron evacuar a todos los inquilinos, aunque los expertos no consideran que pueda desplomarse. Yuri Vorobiov, viceministro de Situaciones de Emergencia, aseguró que se ha destinado el dinero necesario para pagar compensaciones a las familias de las víctimas.