Woody Allen rodará pero no tocará

Mientras le rompen cada poco las gafas al Woody Allen de bronce que pasea por Oviedo, hace unos días la enésima vez, se anuncia el muy posible rodaje de una nueva película del cineasta norteamericano, no en las calles de Manhattan, sino en las de Oviedo o en las de Gijón. El pasado mes de octubre, el autor de Sueños de seductor hizo soñar a los representantes del Principado y de la Fundación Príncipe de Asturias al recibirles durante el rodaje de su último filme, en Nueva York, después de haber recibido en su casa al príncipe Felipe de Borbón, que presidía la expedición asturiana a las fiestas de la Hispanidad. Según informaba el diario La Nueva España, está próximo un acuerdo entre TVE y Canal + para financiar el proyecto de realizar una película sobre los premios Príncipe de Asturias, que el próximo año cumplirán su decimoquinto aniversario. Cuando Woody Allen vino a recoger en 2002 su galardón de las Artes y dijo aquello de que "Oviedo es una ciudad deliciosa, exótica, bella, limpia, agradable, tranquila y peatonalizada; es como si no perteneciera a este mundo, como si no existiera... Oviedo es como un cuento de hadas", la alcaldía de la capital asturiana descubrió un filón turístico. El Gobierno astur y la Fundación Príncipe, también. Y todos comenzaron a actuar para que el director neoyorquino trabajase para que los galardones que se entregan en el teatro Campoamor suenen en todo el mundo. Ahora parece que ya hay presupuesto y disposición por todas las partes. Aunque no sonará la trompeta del cineasta en los garitos musicales astures como en los de Manhattan porque el dinero no corre suficiente en los nocturnos sótanos del jazz de la tierrina.-