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Crítica:FIAT IDEA 1.4 16V. EMOTION | PRUEBA
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Un utilitario práctico para familias con niños

La interpretación moderna de los utilitarios de siempre, con la amplitud interior y las soluciones flexibles de los monovolúmenes y con una calidad de conducción similar a la de los turismos. Así es el Idea, la última propuesta de Fiat para las familias urbanas y también una nueva muestra de su capacidad para sacar el máximo partido a un coche pequeño.

Utilitario monovolumen

Más información
Cómodo y consistente

El nuevo Fiat forma parte de una nueva generación de monovolú-menes pequeños que miden alrededor de cuatro metros de largo (Opel Meriva, Hyundai Matrix, Toyota Yaris Verso...). Aprovechan la base mecánica de los utilitarios de los que se derivan y cuestan en torno a un 15% más. Pero a la vez se sitúan un poco por debajo de los monovolúmenes compactos (Scénic, Picasso...), que miden entre 4,2 y 4,4 metros de largo. Y ofrecen casi lo mismo, pero con un tamaño inferior, para aparcar mejor en ciudad, y unos precios entre un 10% y un 15% más bajos (de 1.200 a 1.800 euros).

El Idea presenta una línea moderna, simpática y sin el aspecto voluminoso y pesado de otros modelos similares. Es la versión monovolumen del Punto, con quien comparte chasis, motores...; pero aporta un diseño diferente, con una carrocería más alta y bien aprovechada. El frontal, muy corto, se prolonga de un solo trazo uniendo el capó con un parabrisas muy aerodinámico (CX: 0,31). En el lateral destaca la línea arqueada del techo y las medidas generosas de las ventanillas. Y el portón trasero incluye una luneta grande y una base de carga baja que facilita el acceso al maletero.

Mentalidad familiar

Al margen de la estética, la línea del Idea permite ofrecer un interior amplio, muy práctico y bien pensado para la vida familiar. La altura lateral facilita el acceso, tanto a las personas mayores como para colocar las sillas de los niños o abrocharles los cinturones. Además aumenta la sensación de desahogo en el interior y permite ir sentado de forma más natural. Así, las plazas delanteras son amplias y cuentan con unas buenas butacas; atrás hay suficiente altura y espacio para las piernas, y el maletero es correcto.

Estas virtudes se completan con una buena flexibilidad interior y muchos huecos para objetos. El asiento de detrás se divide en dos partes, y cada una se regula en longitud e inclinación. Se abaten también por separado para ampliar el maletero, e incluso se puede formar una cama para descansar. Además hay sitios por todas partes para dejar objetos; algunos muy originales, como las dos bandejas y los dos estuches de gafas situados en el techo o las dos guanteras con tapa sobre el salpicadero. Y tiene también bolsas en las cuatro puertas, dos posavasos y una bandeja junto al freno de mano, dos repisas en el frontal del salpicadero y hasta un retrovisor especial para vigilar a los niños.

El diseño interior es moderno, con una consola central bien ordenada, combinaciones en tonos alegres en las tapicerías, plásticos en dos colores con una calidad correcta, y un ambiente luminoso y juvenil. Y está bien acabado, la insonorización filtra los ruidos de rodadura y las suspensiones absorben los baches con solidez para viajar cómodamente.

Tres motores y cinco acabados

El Idea se vende con tres motores, un 1.4 de gasolina con 95 CV (desde 14.085 euros) y dos turbodiésel Multijet, un 1.3 de 70 CV (desde 14.750) y un 1.9 de 100 CV (desde 16.375). Hay cinco acabados: Active, Active Plus, Dynamic, Dynamic Plus y Emotion. Pero el primero incluye ya airbags frontales y de cortina, ABS, radio-CD, asientos traseros deslizantes, elevalunas eléctricos, cierre con mando...

Conclusión

El Fiat Idea es un utilitario muy bien dotado para el uso familiar. Tiene una carrocería monovolumen muy amplia por dentro, unos asientos traseros con múltiples combinaciones

y muchos huecos para objetos. Además es manejable y seguro, e incluye un equipo de serie generoso y unos precios asequibles y justificados.

MÁXIMA FLEXIBILIDAD INTERIOR

La dotación de huecos para objetos y la modularidad interior para repartir el espacio son los mejores argumentos prácticos del Idea como coche familiar.

El diseño prima la funcionalidad, pero sin renunciar a unos plásticos correctos y a unas tapicerías alegres y luminosas. En el salpicadero destaca la posición de la instrumentación en el centro, que permite habilitar dos guanteras sobre el salpicadero, y hay otras dos bandejas frente a cada pasajero de delante. Además lleva el cambio en la consola e incluso aprovecha la altura del techo para alojar dos repisas en los lados, dos estuches para gafas y hasta un espejo para controlar a los niños. En cambio se echan de menos los cajones debajo de los asientos y los cofres en el piso que ofrecen otros monovolúmenes.

La otra gran virtud del Idea es su flexibilidad. Los respaldos delanteros se pliegan hacia delante y pueden formar una cama con los traseros, que también se regulan en longitud e inclinación. Esta solución permite ampliar o reducir el maletero según las necesidades, bien para que los pasajeros de atrás tengan más espacio para las piernas o puedan dar una cabezada, bien para transportar objetos muy largos.

La zaga es sencilla e incluye una luneta grande que mejora la visibilidad.

ECONÓMICO Y MEJOR EQUIPADO

Aunque el acabado Emotion es el más alto del Idea, merece la pena porque los precios son similares a los de la competencia y aporta un equipo de serie más completo, con climatizador, cuatro airbags, ABS y muchos detalles opcionales en sus rivales: llantas de aleación, sensor de aparcamiento, ordenador de viaje, cuatro elevalunas eléctricos... A pesar de esta generosa dotación, cuesta sólo 500 euros más que un Ford Fusion y 300 más que un Hyundai Matrix equivalente. Y los dos vienen de origen con sólo dos airbags, ABS, aire acondicionado y equipo de música.

La diferencia con el Meriva es de apenas 130 euros, pero el Opel incluye lo mismo que los anteriores, salvo el radio-CD, aunque añade el ordenador de viaje. Por último, el Yaris Verso es 300 euros más caro con un equipo de serie inferior: cuatro airbags, ABS, aire y radio-CD.

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