Batasuna descalifica el primer discurso de Imaz al frente del PNV

Pernando Barrena, dirigente de la ilegalizada Batasuna, ahora Sozialista Abertzaleak (SA), calificó ayer de "autista" el discurso de toma de posesión de Josu Jon Imaz como nuevo presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV). Para el radical navarro, el sucesor de Xabier Arzalluz no puede obviar que se ha prohibido a centenares de miles de ciudadanos vascos "su participación directa en la vía política e institucional de este país, por medio de vías de excepción". Además, advirtió de que para todos esos miles de defensores de la autodeterminación, no son buenos tiempos, ya que se ha producido un "retroceso" en los planteamientos políticos del PNV.

Un retroceso que Pernando Barrena explicó mirando al pasado. En su opinión, el discurso de Imaz le sonó como el PNV de hace 16 años, concretamente al Espíritu del Arriaga -discurso de Arzalluz de 1988, tras la escisión del partido-, "con la máxima de intentar que los vascos estemos cómodos en España".

Para el dirigente abertzale, más identificado con el candidato perdedor, Joseba Egibar, el PNV ha entrado en unos parámetros distintos a los que en 1998 le llevó a firmar la Declaración de Lizarra, ya que ahora Imaz busca un nuevo pacto con el Estado y se aleja de quienes reclaman el derecho de libre determinación.

Barrena se refería a la descalificación que el PNV ha hecho de la oferta de los radicales, respaldada por ETA, para ir a las elecciones generales en una única candidatura nacionalista. "Es escandaloso que se rechace esa propuesta por intereses de partido cuando todos hemos interpretado el comunicado de ETA en apoyo a la iniciativa como un oferta de alto el fuego", declaró a Radio Euskadi.

En la búsqueda desesperada de un acuerdo con los peneuvistas, Barrena explicó que la izquierda abertzale podría renunciar a incluir en esa lista a sus dirigentes "si son un problema objetivo por la posibilidad de que la candidatura fuera anulada". También ofreció garantías suplementarias -aunque no citó cuáles- a las que propiciaron la Declaración de Estella para que pueda volver a haber confianza entre PNV, EA y SA: "Habrá que buscar cuáles son esas garantías, de qué manera tienen que darse y, en ese sentido, cómo pueden permitir con la conjunción de todas las partes, crear un nuevo escenario político con ausencia permanente de violencia", explicó el dirigente navarro de SA.

Barrena aseguró que si el acuerdo entre el PNV y EA no es posible, SA encontrará la manera de "hacer palpable" su proyecto.