Tres consejeros tienen que dimitir para ser candidatos al Congreso

Tres miembros del Gobierno andaluz tendrán que dimitir para optar como candidatos al Congreso, ya que, según la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg), los miembros de los Consejos de Gobierno autonómicos son inelegibles para esa Cámara. Los titulares de Economía, Magdalena Álvarez; Gobernación, Alfonso Perales; y Cultura, Carmen Calvo, deberán cesar antes de la presentación oficial de las candidaturas, lo que originará una situación inédita en el Ejecutivo andaluz.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, tendrá que decretar el cese de los tres consejeros para que éstos puedan figurar en las listas del PSOE al Congreso de los Diputados por las provincias de Málaga (Magdalena Álvarez), Cádiz (Alfonso Perales) y Córdoba (Carmen Calvo) y nombrar a sus sustitutos, que apenas estarán en sus puestos un mes y medio antes de que el Ejecutivo entre en funciones tras la celebración de las elecciones autonómicas.

Según la Loreg, los miembros de los Consejos de Gobiernos autonómicos, entre otros cargos, no son elegibles para el Congreso de los Diputados, por lo que los tres consejeros deberán dimitir antes de que los representantes legales de su partido presenten las candidaturas ante la Junta Electoral, entre el decimoquinto y el vigésimo día posterior a la convocatoria de los comicios. En el escrito de presentación de las mismas, según estipula el artículo 46.2 de la Loreg, debe acreditarse las condiciones de elegibilidad de los candidatos. Esta imposición legal no afecta al presidente del Parlamento de Andalucía, Javier Torres Vela, quien liderará la lista del PSOE al Congreso por la provincia de Granada.

En el caso de que las elecciones andaluzas se celebren el 7 de marzo, conjuntamente con las generales, los tres miembros del Gobierno andaluz deberán dejar sus cargos antes del 25 de enero, según fuentes de la Junta de Andalucía.

La salida en bloque de tres consejeros originará una situación inédita en el Ejecutivo autonómico, aunque los socialistas quieren revestirla de normalidad y de continuidad. Fuentes del Gobierno indiciaron que "lo lógico" es que los viceconsejeros actuales salten al primer puesto del escalafón de las respectivas consejerías y que no se produzca un nombramiento que indique una proyección de futuro, dado que los nuevos consejeros apenas tendrán tiempo para, salvo sorpresas inesperadas, dejar improntas personales.

El Gobierno andaluz ya vivió una situación parecida, aunque de menor calado, en las elecciones de 2000, cuando el entonces consejero de Turismo, José Núñez, encabezó la lista del Partido Andalucista al Congreso por Cádiz. Núñez apuró hasta el último momento para dimitir (es decir, 20 días después de la convocatoria de las elecciones) y fue sustituido por su viceconsejero, Francisco José Aguilera.

La salida de Alfonso Perales de la Consejería de Gobernación es, de las tres, la que mayores problemas puede acarrear dado que este departamento organiza las elecciones autonómicas. Gobernación ha incrementado en un 50% la partida de gastos para las elecciones debido, según afirmó el pasado 6 de noviembre el consejero, a "la aplicación de las nuevas tecnologías" y al "refuerzo" de las campañas institucionales para incentivar la participación y el voto por correo.