"Maldigo a los que dejan morir la música en una manta"
José Luis Figuereo (Cádiz, 1970) fundó el grupo El Barrio. Bebió de Camarón y de Chano Lobato, pero también de Triana, Medina Azahara y Cai. Su sexto disco, Ángel malherido, acaba de ver la luz.
Pregunta. ¿Quién es el ángel malherido del título?
Respuesta. Se trata de alguien que fue al cielo sufriendo un desengaño de amor y desde allí da consejos buenos y malos a quien quiere escucharlos.
P. El Barrio no sólo no parece malherido, sino que figura como el único superviviente del llamado Nuevo Flamenco.
R. No sé si el único, porque todavía hay gente de aquel movimiento haciendo cosas. De mi quinta, es cierto, sólo quedo yo.
P. ¿Cuál es el secreto?
R. Tal vez la fusión de flamenco y rock andaluz, que nadie más ha intentado. Letras identificativas, ritmos del sur y canciones que no pasen por un estribillo pegadizo de verano.
P. Dicen que es usted cada vez más roquero y más poeta.
R. Más roquero sí. Será porque últimamente los productos flamencos que salen no me llaman la atención y en cambio el rock sí me sigue interesando. Tanto como poeta, no. Lo que sí noto es que tengo más tablas y más vocabulario para escribir.
P. También ha asumido, por primera vez, los arreglos y la producción.
R. Creo que no hay mejor obra que aquella en la que el autor cuida de todos los detalles. También he contribuido con las fotos y el vídeo, siempre con el deseo de dar al público lo más próximo de mi persona.
P. ¿Volvería a tocar la guitarra para el cante, como en sus inicios?
R. Dios quiera que no dé marcha atrás, porque ese oficio no me compensaba económicamente. Pero bueno, ahora tengo una hija en el mundo, con tres meses, y hay que darle de comer. Si se tiene que hacer, se hace.
P. Ángel malherido ha sido disco de oro en 36 horas. ¿Dónde está el techo?
R. Para una casa de discos no hay techo. Lo gracioso es que El Barrio es uno de los productos más pirateados.
P. ¿Es ese el ángel exterminador de la música española?
R. Está la grabadora, las compañías que sacan productos por sacarlos, por si suena la campanita, y las que destrozan la carrera de un chaval que tiene ilusiones. Internet también aporta su grano de arena en el exterminio, pero contra el futuro no se puede luchar.
P. Usted denunció la piratería antes que la SGAE.
R. La piratería está acabando con todo. Me compadezco de quienes tienen que subir a una patera para buscar su futuro, pero maldigo a los que dejan morir la música en una manta.
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