Absueltos por segunda vez los cuatro acusados en el 'caso Padre Coraje'

La Audiencia de Cádiz ha absuelto a los cuatro procesados por la muerte de Juan Holgado, asesinado en 1995. Holgado, de 26 años, fue atacado en la gasolinera de Jerez donde trabajaba. Es la segunda sentencia absolutoria. El Tribunal Supremo ordenó repetir el juicio para que se tuvieran en cuenta las cintas grabadas por el padre de la víctima, conocido como Padre Coraje, que se infiltró en ambientes marginales en busca de sospechosos.

La Sala concluye que, aunque pudieran existir indicios sobre la participación en los hechos de los acusados, no hay pruebas suficientes que permitan condenarlos. El padre de la víctima, Francisco Holgado, se mostró "absolutamente desolado" tras conocer la sentencia y anunció que presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo.

Domingo Gómez Franco, Pedro Asencio, Manuel Jesús Sañudo y Francisco Escalante han quedado absueltos del delito de robo con homicidio del que se les acusaba, al no existir pruebas que les relacionen con el asesinato de Juan Holgado.

En los fundamentos de derecho, la sentencia destaca la "inexistencia de pruebas directas de primer grado que puedan abonar un resultado probatorio contrario a los acusados". Subraya el resultado negativo de los análisis de ADN realizados a partir de las manchas de sangre halladas en el lugar de los hechos y la fallida prueba de las huellas dactilares encontradas en la gasolinera, que no se correspondían con las de ningún procesado.

El tribunal se detiene también en el testimonio inculpatorio de una testigo, Antonia Macías, y señala que venía "acompañado por la polémica acerca de su veracidad". El texto añade que, aunque la declaración de Macías fue muy larga y llena de detalles, la mayoría de estos datos "pueden ser extraídos de las noticias de prensa aparecidas por entonces". El relato de la testigo, según los jueces, presentaba "multitud de inexactitudes".

En cuanto a la medalla con el signo zodiacal Virgo hallada en el escenario del crimen, la sentencia afirma que "todo son discordancias entre los testigos acerca de la propiedad de la misma".

Las cintas que Holgado grabó tras introducirse en los bajos fondos de Jerez en busca de pruebas tampoco han aportado datos relevantes, en opinión de los jueces. "Nada puede extraerse de esas grabaciones, ni siquiera material probatorio en relación con los coimputados", recoge el dictamen.

La conclusión final del tribunal que se hizo cargo del segundo juicio, y que es distinto al del primero, celebrado en 1999, es muy clara: "Después de haber conocido el contenido del sumario y de la instrucción suplementaria, oídas las cintas grabadas, las manifestaciones de los procesados, peritos y testigos durante 15 largas sesiones, no existe prueba de cargo suficiente para destruir la presunción de inocencia de los acusados". La sentencia va más allá al explicar que "las meras sospechas o indicios" no excluyen la duda, pero son inhábiles para condenar.

Holgado, con expresión de gran contrariedad, anunció que su abogado presentará un recurso de casación antes de cinco días ante el Supremo. "No, esto no ha terminado, porque es que se están riendo de las víctimas. Yo esperaba más de este juicio", manifestó. La madre, Antonia Castro, se mostró apenada. "Nos han terminado de destrozar, pero vamos, seguimos adelante", aseguró.