_
_
_
_

Las Cortes consensúan un texto sobre la Constitución, pero difieren en su interpretación

La oposición dice que reconoce que se puede reformar la Carta Magna y el PP lo niega

El consenso llegó in extremis, pero llegó. Los tres grupos de las Cortes Valencianas alcanzaron ayer un acuerdo en torno al texto de la declaración institucional que se tenía que leer durante el pleno convocado para conmemorar el 25º aniversario de la Constitución. Las diferencias que el lunes hicieron imposible el acuerdo quedaron limadas ayer minutos antes del inicio del pleno. Todos cedieron y al final aprobaron un texto que, según la oposición, reconoce que la Constitución se puede reformar pero que, según el PP, "en absoluto" recoge "ninguna indicación" sobre la reforma.

"De cara al porvenir, la Constitución de 1978 contiene recursos suficientes para abordar y adaptarse a los problemas de nuestra moderna sociedad". Esta frase, incluida en la declaración finalmente aprobada ayer por los tres grupos parlamentarios que leyó el presidente de las Cortes, Julio de España, fue el principal escollo y fue interpretada de forma diferente. Los populares, que, en línea con la doctrina oficial de su partido y del Gobierno, no querían que en el texto apareciera referencia alguna a la posibilidad de reformar la Carta Magna, afirmaron que esa redacción cumplía con esa premisa y se dieron por satisfechos tras la inclusión de dos palabras -"y adaptarse"-. Según su portavoz en las Cortes, Serafín Castellano, la declaración aprobada "en absoluto" recoge "ninguna indicación" sobre la reforma, sino que "simplemente se dice" que la Constitución tiene "los suficientes recursos para adaptarse a las necesidades del pueblo español".

También se dieron por satisfechos los socialistas, cuyo portavoz, Joan Ignasi Pla, consideró que la Constitución "no es un texto cerrado", sino una norma "flexible y muy abierta".

Incluso Joan Ribó, portavoz de EU-L'Entesa, aprobó esa redacción, eso sí, sin "excesivo entusiasmo" y "en aras al consenso". No en vano, la redacción aprobada quedaba lejos de la propuesta de Ribó, cuyo texto incluía varias referencias explícitas a la necesidad de reformar la Carta Magna.

El acuerdo en torno a la redacción de la declaración institucional que califica a la Constitución de 1978 como "el mejor marco para ordenar en paz y en libertad la convivencia de los españoles", tuvo que superar otros escollos menores. Entre ellos la referencia que el primer texto remitido por De España a los grupos hacía a los avances que la Carta Magna ha propiciado "en los últimos años", que los socialistas interpretaron como un intento del PP de "llevarse la Constitución a su terreno". Finalmente la referencia que quedó fue la relacionada con los 25 años de vigencia del texto.

Antes de la lectura de la declaración institucional se guardó un minuto de silencio en memoria de los siete agentes de inteligencia asesinados el sábado en Irak. El presidente del Consell, Francisco Camps, no asistió al pleno, pues acudió al funeral de Madrid, pero sí todos sus consejeros. En la tribuna de invitados, entre otros, estaban el ex presidente José Luis Olivas y la ex presidenta de las Cortes Marcela Miró.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Oportunismo, ascuas y sardinas

El PP ha mostrado últimamente una repetida tentación oportunista de arrimar el ascua a su sardina. Tanto da que sea con motivo de la Constitución o a cuenta del día internacional contra la violencia de género, pero también con ocasión de otros asuntos de menor rango, como muchas iniciativas parlamentarias. El caso es que los populares intentan constantemente introducir referencias a su Gobierno, a su gestión y a sus logros. Lo que se pretendía con motivo de la declaración institucional de ayer era tan obvio que mereció una irónica propuesta del portavoz adjunto socialista, Antoni Such, cuando el lunes dijo que, a la hora de plasmar los logros propiciados por la Constitución, al PP sólo le había faltado decir lo que se ha avanzado "en los últimos ocho años" y no en los 25 de vigencia de la Carta Magna.

Con ocasión del día internacional contra la violencia de género el PP aprobó en solitario su iniciativa de rechazo tras hacer casi imposible el consenso con la oposición, por su empeño en incluir en el texto el reconocimiento y apoyo a los "esfuerzos" de los gobiernos central y autonómico en su erradicación. Era, de nuevo, el oportunismo, el ascua y la sardina. Y eso que el PP reclamaba "no instrumentalizar políticamente" el asunto.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_