Ansaldo y Cobra recurren la adjudicación de dos contratos de señalización del AVE a su rival Siemens
El consorcio formado por la italiana Ansaldo, la española Cobra (filial de ACS) y la canadiense Nortel ha recurrido ante el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) la adjudicación de dos contratos de señalización de las líneas de alta velocidad Lleida-Barcelona y Segovia-Valdestillas (Valladolid) a un grupo liderado por la alemana Siemens, por un importe conjunto de 544 millones de euros. Ansaldo-Cobra considera que sus ofertas eran más bajas y se ajustaban mejor a lo estipulado en ambos concursos.
Ansaldo-Cobra se encargó de los sistemas de señalización (permiten a los trenes circular a una velocidad punta de 350 kilómetros por hora) del AVE Madrid-Lleida y el Gobierno le recriminó en su día ser el principal responsable del retraso de más de nueve meses de la puesta en marcha de esta línea. Pese a todo, el grupo se presentó a otros tres nuevos concursos, ganados los tres por el
consorcio formado por Siemens, la francesa Alcatel y las españolas Dimetronic e Indra
. Pero Ansaldo-Cobra no está dispuesto a quedarse de brazos cruzados y ha recurrido dos de las adjudicaciones aprobadas por el GIF, dependiente del Ministerio de Fomento.
Ansaldo, Cobra y Nortel consideran que sus ofertas han sido más bajas. De los dos contratos recurridos, el más importante es el de la señalización y comunicaciones del tramo Lleida-Barcelona, adjudicado el 17 de octubre pasado por 335 millones. Esta cantidad es un 11% superior a la fijada en el anuncio del concurso, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 24 de junio pasado. Mientras tanto, la oferta de Ansaldo-Signal alcanzaba los 271 millones, un 30% inferior.
El presidente de Siemens España, Eduardo Montes, salió el jueves pasado en defensa de la adjudicación del contrato. "En los concursos públicos hay una calificación técnica y económica, y la suma de las dos da un ganador. Lo que no me parece lógico es ser tan simplista y fijarse sólo en el precio", afirmó Montes en una conferencia de prensa para anunciar los resultados de Siemens en España, que alcanzó un beneficio antes de intereses e impuestos de 118 millones en el año fiscal 2002-2003, un 48,16% más que en el ejercicio anterior.
La decisión de Fomento de adjudicar los nuevos contratos al consorcio liderado por Siemens ha supuesto un duro revés para Ansaldo Signal, que pretendía convertirse en el líder de este negocio en el mercado español.
