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Denuncia por la expulsión de un homosexual que abrazó a su pareja

Javier Arroyo

Alejandro Notas, un estudiante de Traductores de Granada, de 21 años, ha denunciado que los responsables de la discoteca Granada 10, de la capital granadina, lo expulsaron del local por abrazar a su pareja en la pista de baile. Notas aseguró: "Tan sólo estábamos abrazados por la cintura". Para Roberto Martín, responsable del local, la pareja "estaba bailando mientras se pasaban de la raya, metiéndose mano y frotándose".

Martín aseguró que no se les echó a la calle a la primera. "Se les llamó la atención, como a cualquier pareja, pero ellos siguieron con su actitud y los echamos", explicó Martín.

Notas, sin embargo, cuenta que los echaron a la primera y de una forma degradante. "Primero, me señalaron con un láser desde una planta de arriba". Notas dice que, cuando se dirigió al guardia para preguntarle qué significaba eso, éste le respondió que en el local "se prohibe tocar entre hombres". Acto seguido, enganchó a ambos de los hombros y los expulsó de la discoteca, según Notas.

El joven presentó una reclamación en el local. Semanas después recibió la respuesta. Según ésta, su conducta no coincidía con los "cánones generalmente aceptados por la sociedad, que son los que rigen esta empresa". Alejandro considera esta respuesta casi más humillante que la expulsión del local.

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