Una temporada ruidosa

La previa de la NBA, que comienza mañana, llega cargada de alicientes. No es tarea fácil buscar un titular a una temporada que presenta multitud de novedades, interrogantes e ilustres ausentes. Pau Gasol y Raúl López acaparan el interés del aficionado español, LeBron James y los galácticos Lakers son las atracciones de un escaparate de lo más lujoso. Un escalón por debajo, la gama de matices interesantes es tal que habría que recurrir al socorrido tópico y publicitar que se trata de la liga más competida de los últimos años. En ella no estarán ni Michael Jordan ni John Stockton ni David Robinson. Tres representantes del primer y para muchos genuino Dream Team pasan al ilustre apartado de jugadores retirados.

- Kobe, al banquillo. Kobe Bryant tendrá que sentarse en el banquillo sin rechistar. Su temporada estará determinada por lo que dictamine el juez Frank Gannett y el jurado que llevará su caso. Si los plazos se cumplen, el próximo mes comenzará el juicio en el que se le acusa de violación. El circo a su alrededor está formado y ahora queda descubrir como afectará todo ello al jugador y a su equipo. De momento, la directiva de Los Ángeles Lakers ha denegado la acreditación a todo aquel periodista ajeno al baloncesto que pudiera perturbar a su estrella.

Lejos de su peso habitual y sin haber lanzado un tiro en todo el verano, como el mismo Bryant reconoció, el jugador se apresta a vivir una temporada muy especial. Dentro del equipo hay temor a que exagere sus rasgos individualistas para reivindicarse ante la opinión pública. Ya se ha atisbado esta tendencia durante los dos partidos de pretemporada que ha disputado y Gary Payton ya ha dejado las cosas claras: "No hay dudas de que es un competidor y su juego le lleva a lanzar mucho a canasta. Pero a veces no puedes hacerlo. El cuerpo te dice no". Phil Jackson le ha asegurado un puesto en el quinteto titular pero su rendimiento durante la temporada es una incógnita.

- Los galácticos de Phil Jackson. Mediatizados por el efecto Bryant, uno de los mejores quintetos jamás formado se presenta como el gran favorito a ganar el anillo. Como plantilla hay dudas de que la de Los Ángeles Lakers sea la mejor, como equipo titular nada puede hacer sombra a cinco hombres que si mantienen sus estadísticas de la temporada pasada, promediarán 105 puntos por partido. Para completar el pastel, contarán con uno de los mejores entrenadores de la historia, Phil Jackson, en busca de su décimo título como técnico.

Gary Payton y Karl Malone buscan la última oportunidad para no retirarse sin un campeonato. Han sacrificado casi la totalidad de su sueldo para poder estar a las órdenes de Jackson. Habrá que observar cómo se adapta Payton, un base puro, al mecanismo del triángulo ofensivo, y si Malone, con 40 años, sigue siendo un jugador determinante. Pero quizá la palabra clave en estos galácticos Lakers sea convivencia. ¿Coexistirán en armonía tanto gallo en un mismo corral? La flema y la espiritualidad zen de Phil Jackson se examina de nuevo frente a un espinoso asunto. Casi todos los anteriores los domó con soltura. Ahora tiene que demostrar que es capaz de lidiar con cuatro jugadores que estarán tarde o temprano en el Hall of Fame.

- El efecto de LeBron James. El aura de Lebron James ya recorre la liga. La cadena que tiene los derechos televisivos de la competición tiene programado televisar en 13 ocasiones al peor equipo de la temporada pasada, el Cleveland Cavaliers. La expectación que ha despertado el otro número 23 suscita tal cobertura. Está por ver cuál será el impacto deportivo de James, ¿será capaz de clasificar para los playoff a una franquicia que tan sólo pudo ganar 17 de los 82 encuentros de la campaña anterior? El económico y el mediático es indiscutible. Sus primeros partidos con los Cavaliers han descubierto a un jugador completo que va a jugar de base a pesar de las reticencias iniciales de su técnico, Paul Silas. Lo que más preocupa de momento es la acentuada inconsistencia de su lanzamiento exterior. Durante los partidos de pretemporada sus porcentajes han sido muy pobre: 32% en el tiro de dos y 8% en los triples. El problema para su entrenador está en la incorrecta ejecución del movimiento, para el jugador se trata de una simple cuestión mental.

Su primer partido ante el Sacramento Kings será retransmitido en directo para todo Estados Unidos. Siete revistas de tirada nacional llevan esta semana la foto de James en sus portadas. Una de ellas se pregunta si un joven de 18 años será capaz de llevar el peso de la liga. Que nadie piense que el titulo de novato del año ya tiene dueño asegurado. Esta vez sí, la nueva hornada de recién llegados parece de lo más interesante: Carmelo Anthony, T.J.Ford, Dwyane Wade y Darko Milicic.

- Crecen los Grizzlies. Pau Gasol ya lo advirtió en verano cuando le preguntaron si su equipo llegaría a los playoff: "Ni pa Dios". En la conferencia Oeste, el Memphis Grizzlies aún no está capacitado para demasiadas cosas.

El objetivo será de nuevo ganar más partidos que el año pasado. Para ello, tanto el entrenador, Hubie Brown, como el manager general, Jerry West, han puesto el acento en la defensa. Todos los cambios que se han hecho en el equipo están orientados a que se encajen menos puntos. En este apartado del juego, los Grizzlies fueron uno de las peores franquicias durante el curso pasado.

El jugador español volverá a ser el referente ofensivo del conjunto. Con la posición de pívot mejor cubierta, su juego debe tender a ser más dinámico y diverso. Eso en Memphis no preocupa, la gran tarea que tiene Gasol este año es convertirse en un mejor defensor, que a sus manos lleguen más rebotes y que de una vez por todas deje de perder tantos balones. Ahora no tendrá que contener a tanto peso pesado como en campañas anteriores. Sin embargo, si hay un puesto en la liga que esté lleno de estrellas es el de ala-pívot. En ese selecto grupo es en el que pretende tener un sitio el catalán.