"Sainz y yo simplemente charlamos como personas educadas"
Tras 15 años como copiloto de Carlos Sainz, Luis Moya acaba de debutar en el Mundial de rallies como director deportivo de la escudería Subaru. Las relaciones con el doble campeón mundial se tensaron el año pasado, cuando Sainz acabó fichando por Citroën pero Moya no aceptó la oferta para seguir al lado del madrileño. El gallego (43 años) se dedicó entonces a sus cosas, y tenía previsto aceptar un trabajo en Miami, cuando hace unas semanas recibió una llamada de David Richards, director de Subaru, para que se incorporara a su equipo. De golpe se convirtió en el peor enemigo de Sainz: dirige a Petter Solberg, segundo en el Mundial a tres puntos del líder, el piloto que, junto a Richard Burns, intentará impedir que Carlos Sainz se proclame campeón mundial en Cataluña.
"Conozco muy bien a Carlos y sé que atacará para sacar ventaja antes de llegar a Inglaterra"
Pregunta. ¿Desde cuándo en Subaru?
Respuesta. Oficialmente desde el 1 de octubre. He firmado por el final de esta temporada y la próxima. Creí que era mejor para mí y para el equipo. Si les gusta como trabajo y las cosas nos van bien, seguiremos. Tengo muy buen feeling, creo que irá para largo.
P. Pocos copilotos han llegdo a director deportivo de un equipo.
R. David Richards, patrón de Bar de F-1 y nuestro jefe, lo fue. Y también lo fue Jean Todt, director de la escudería Ferrari de F-1. Pero no puedo compararme a ellos.
P. ¿Cuál es su misión en Subaru?
R. Encargarme de la parte deportiva del equipo: las relaciones con la Federación Internacional, con los organizadores, encargarme de los pilotos, preparar las tácticas de carrera, aportar mi experiencia de 15 años, y descargar al jefe de equipo de cualquier responsabilidad deportiva.
P. Lo que más se recuerda de usted es lo de arrasss, arráncalo Carlos, etcétera, pero tal vez se olvide la importancia del copiloto para ganar los títulos.
R. Sin duda. Hoy el copiloto es muy importante, porque antes se entrenaban más los tramos y los pilotos conocían mejor el terreno. Marc Martí me contó que lo está pasando mal. Está haciendo un trabajo muy bueno, pero le cuesta habituarse porque se va a una velocidad alucinante y es difícil concentrarse en las notas.
P. ¿Tras separarse de Sainz, este cargo le reivindica dentro del mundo de los rallies?
R. No. Terminé con Carlos, hice triatlones, seguí preparándome físicamente, pero me tomé un descanso tras estar más de 200 días por temporada fuera de casa durante 15 años. Tenía previsto ir a trabajar a Miami después del verano, y entonces me llamó Richards.
P. ¿Qué posibilidades tiene Solberg de ganar el título?
R. Creo que Petter y Carlos Sainz están muy igualados. Si hay lluvia en el Catalunya, podemos aguantar la presión de Sainz y evitar que se distancie más, luego Solberg y el equipo Subaru serán los favoritos número uno en Gran Bretaña. Ya ganó allí el año pasado y los neumáticos Pirelli funcionan de maravilla en aquellas condiciones de frío y barro. Lo importante es no descolgarnos en el Cataluña y, a ser posible, reducir un poco la distancia de tres puntos que ahora nos lleva Carlos.
P. El terreno en el Cataluña favorece a los Citroën.
R. Sin duda. Hace cinco años que Subaru no gana en asfalto [Córcega en 1998]. La estadística indica que quienes deben ir delante son Citroën, Peugeot y Ford. Citroën más porque ha dominado este año en asfalto, pero se lo pondremos difícil.
P. ¿Se ha convertido en el principal rival de Sainz, tiene algún resentimiento con él?
R. En absoluto. Cada cual ha hecho su vida y ahora nos encontramos en equipos distintos. Soy director deportivo de Subaru y voy a hacer lo imposible para que ganemos, sin pensar si enfrente tengo a Sainz, Burns o quien sea. No me preocupo por los demás, sólo por nuestro equipo.
P. ¿Cómo ha reaccionado Carlos cuando se han encontrado?
R. Normal. Nos hemos saludado y hemos hablado. Pero las relaciones se han enfríado porque no estamos juntos tanto tiempo como antes. Simplemente, charlamos como dos personas educadas que somos.
P. ¿Qué recuerdos le vienen a la cabeza de los 15 años que estuvo con él?
R. Los dos campeonatos del Mundo que ganamos en 1990 y 1992. Prefiero recordar eso que las situaciones desgraciadas que vivimos, porque es muy difícil ser campeón del mundo en cualquier deporte. Hay un dato que nunca olvido: sigo siendo el copiloto más laureado del Mundial de rallies.
P. ¿Puede ayudarle conocer tan bien a Sainz y saber sus estrategias en el Catalunya?
R. Le conozco mucho, es cierto, y sé que es muy cerebral y experimentado. Va a jugar bien sus bazas. En el Catalunya intentará sumar puntos para llegar al Rally de Gran Bretaña con la mayor distancia posible. No se la jugará sólo en Inglaterra, atacará aquí. Pero apenas sentirá la presión porque la tuvo muchas veces. Igual que Solberg, que no ha ganado ningún campeonato, pero tiene la cabeza muy bien amueblada. Es muy joven y tiene un gran concepto de la estrategia: sabe cuándo tiene que atacar, cuándo no, si debe levantar el pie. Lo hace muy bien. Tengo una gran confianza en él.
P. ¿Cómo son sus relaciones con Solberg y Makinen, los pilotos de Subaru?
R. Excelentes, porque considero una suerte poder trabajar con el cuádruple campeón mundial Tommy Makinen, y con Solberg coincidí en Ford. El próximo año Richard Burns, con quien tengo una gran amistad, sustituirá a Makinen. Tendremos un equipo muy competitivo y daremos batalla.
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