Infraestructuras pendientes

Esta vez no había tanta expectación en la cena de la Nit de l'Empresari, que organiza desde hace seis años la patronal de Terrassa Cecot. Faltaban los protagonistas que el año pasado tanto interés generaron: el presidente del Gobierno central, José María Aznar, y el presidente catalán, Jordi Pujol. La del viernes fue la cena de los candidatos. Y a juicio de los comentarios que se oían entre los más de 1.000 empresarios congregados, la mayoría de la pequeña y mediana empresa, fue todo un poco "aburrido".

Tampoco hubo colas para hacerse fotos. El año pasado, todo el mundo quería inmortalizarse junto a Aznar y su esposa, Ana Botella. "Esperaba más teniendo en cuenta que las autonómicas están a la vuelta de la esquina", confesaba un empresario.

Clima frío entre Mas y Montoro en la cena de los empresarios de Terrassa

Artur Mas, conseller en cap y candidato de CiU, se sentó frente al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aunque apenas si se dirigieron la palabra durante todo el acto. En otra mesa estaba el candidato del PP, el ex ministro Josep Piqué. Que al acto de la Cecot acudiera Montoro, que había confirmado su asistencia un día antes, según se pudo oír entre las mesas, no le hizo gracia alguna a Mas.

En su discurso, el ministro se preocupó de ensalzar a Piqué, sin olvidar mencionar "la leal colaboración de CiU" durante los años de gobierno del PP. Asimismo quiso dejar claro ante los empresarios que el Gobierno del PP ha hecho bien los deberes. Montoro afirmó que actualmente Cataluña tiene la mitad de la tasa de paro de 1995 y que en 2002 se sumó a las regiones desarrolladas de la UE, y pasó por alto las insinuaciones del presidente de la Cecot, Eusebi Cima, y las del conseller en cap, Artur Mas, que reclamaban más competencias.

Mas recordó a Montoro, aprovechando que lo tenía ante él, que "hay cosas pendientes", como "los autónomos y las microempresas". Tampoco olvidó recriminar al Partido Popular "los impedimentos" que está poniendo la Administración central al Ejecutivo catalán en la gestión de la inmigración desde los países de origen.

Eusebi Cima fue, a juicio de un empresario, el más "sustancioso". "Es que Cima ha sido el más directo y el más claro", señalaba. Al presidente de la Cecot, como representante de la pequeña y mediana empresa, le tocó el papel de reclamante. "Es una lástima", señaló, "pero si recuperasen mi discurso de hace cinco o seis años, estaría pidiendo las mismas infraestructuras que ahora". Cima advirtió de que "el actual ritmo de crecimiento no es suficiente" y añadió que "hacen falta nuevas reglas del juego". Entre otras cosas, Cima pidió para el empresariado catalán más capacidad de decisión, más autonomía para financiar el propio crecimiento y más proyección internacional.

En la cena se homenajeó a Juan Antonio Samaranch, ex presidente del Comité Olímpico Internacional, quien manifestó que "Pujol es el mejor político de todos los tiempos que ha tenido Cataluña".