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Va de bodas

Esta semana las revistas se han puesto en plan elegante y han mandado a sus redactores a varias bodas de alto standing. Vamos, que están muy de crónica social de antes, cuando las páginas de los semanarios rosas se ocupaban de las familias de la realeza, de políticos o de familias económicamente poderosas y la gente no se tiraba los trastos en programas de televisión. Todas las revistas abren con el enlace de la princesa Victoria de Borbón­Dos Sicilias con el armador griego Markos Nomikos en Almagro en la que estuvo la familia real al completo y mucha gente más (hasta 500). A destacar las impresionantes pamelas de las invitadas, entre ellas las de las infantas Elena y Cristina. También se han casado Filiberto de Saboya y la actriz Clotilde Courau. Y lo hicieron en Roma ante un montón de invitados. Y como los tiempos cambian para todos, incluidos para los descendientes de familias reales, no pasa nada porque los novios se casen por la Iglesia y en diciembre tengan a su primer retoño. Y de Italia a Asturias, donde ha contraído matrimonio la hija de Francisco Álvarez-Cascos. Un poco incómodo porque, claro, estaba el padre de la novia, la madre, pero se ausentó Gema Ruiz, la segunda mujer de Álvarez-Cascos. Son situaciones, a veces, un poco tensas que se dan hasta en las mejores familias. Y es que en todos los sitios cuecen habas.-

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