Rigol pide a los partidos que no traten al ciudadano como "mero consumidor"

El presidente del Parlament, Joan Rigol, ensalzó ayer los "valores republicanos" de la pluralidad, el civismo y la cultura para superar el divorcio creciente entre sociedad y partidos, que acaban considerándolo todo mercancia y convierten al ciudadano en "mero consumidor".

En una conferencia en el Foro Tribuna Barcelona, Rigol reiteró sus conocidas tesis críticas sobre la política que vive más de la cultura mediática que de la ideología. Y lo hizo ante destacados exponentes de los grupos parlamentarios y un candidato, el socialista Pasqual Maragall.

El presidente del Parlament afirmó que los partidos deben reflexionar sobre "si han de gastar tanto dinero mediático", y lamentó que las formaciones políticas caigan siempre en una "espiral de campaña". Ese gasto se suma al desencuentro con la ciudadanía al que puede poner fin el "bagaje regeneracionista enorme" de la cultura catalana.

El presidente del Parlament concluyó que para superar la desconfianza que generan los políticos en la sociedad, hay que avanzar "en la voluntad de servicio".

El panorama que el político democristiano dibujó no es muy alentador, pues, a su juicio, los políticos actuales buscan ganar las elecciones y no objetivos a largo plazo. Nos hallamos, según diagnóstico de Rigol, en un reino gobernado por el tacticismo y lo coyuntural "Los políticos basan sus actuaciones en función de los votos que pueden obtener". Por ello, el presidente del Parlament recomendó a los políticos que no vean como un adversario a otro representante político, sino "al que diluye el bien común".

Como balance de esta sexta legislatura que concluye, Rigol tachó de "fracaso" que los partidos catalanes no hayan sido capaces de pactar una ley electoral catalana y propuso que en Cataluña se aplique un "sistema alemán", por el que se vota al representante de una circunscripción y también a una lista de un partido.