"Debimos encarar a Lituania sin tanta tensión, disfrutando más de la final"
Rodeado de sus compañeros, de sus amigos, de sus familiares..., Pau Gasol (Barcelona, 6 de julio de 1980) trató de relajarse tras las fuertes emociones vividas en los últimos días en el Campeonato de Europa de baloncesto durante las pocas horas disponibles antes de emprender el regreso a España, donde la selección tuvo ayer, en el aeropuerto de Madrid-Barajas, un recibimiento multitudinario.
Alguien que le conoce muy bien aseguró que la derrota ante Lituania en la final (84-93) le sentó tan mal que no pudo dormir en toda la noche de despedida en Estocolmo.
Tras colgarse del cuello la medalla de plata, que no la de oro; tras alcanzar la mejor anotación de su carrera profesional, 36 puntos, pero inservible para evitar el triunfo del adversario; tras proclamarse agridulcemente el máximo encestador del torneo, a Gasol ya sólo le resta volver en breve a Memphis (Tennessee, Estados Unidos) para iniciar su tercera temporada en la Liga profesional norteamericana (NBA) con los Grizzlies.
"Un jugador 'nba' tiene que demostrar por qué está allí. Pero el mejor ha sido Jasikevicius"
"Navarro, Garbajosa y yo absorbimos el ataque. Otros debieron asumir más responsabilidad"
"Hemos dejado escapar una ocasión buenísima. Teníamos la capacidad necesaria para ganar"
Pregunta. ¿Con qué sensación ha acabado el Campeonato de Europa?
Respuesta. Con la de que en Suecia hemos dejado escapar una gran ocasión, una oportunidad buenísima, de llevarnos la medalla de oro. ¿Que podemos estar contentos con haber ganado la de plata? Sin duda alguna. Ha sido un buen resultado. Estamos en los Juegos Olímpicos [de Atenas 2004]. Nos sentimos muy contentos por lo conseguido y lo trabajado. Pero, insisto, hemos dejado pasar una oportunidad buenísima y nos queda ese sabor de boca amargo. Estábamos en disposición de ganar a Lituania en la final. Tenemos la sensación de que todo podría haber ido mejor, mucho mejor; de que podríamos haber salido con otra mentalidad, sin tanta tensión, y haber intentado disfrutar mucho más del partido.
P. ¿Ha pasado eso porque ustedes mismos se presionaron más o por la presión que recibieron directamente desde fuera?
R. Todos los detalles influyen en una final tan importante. Pero ha sido más la tensión por nuestra parte, mezclada con la ilusión que teníamos por ganar el título. Al final, todo eso te acaba perjudicando.
P. Es cierto que su club le puso impedimentos para jugar esta competición.
R. Sus directivos no querían que jugase con la selección española por motivos de seguridad, para que no me lesionara, para eludir el peligro de sufrir algún percance grave. Pero yo también tenía claro que quería estar con el equipo nacional y que ellos no podrían ponerme impedimento alguno. Al final, hablé con el jefe, con Jerry [West], y no hubo ningún problema.
P. ¿Es prioritaria para usted la cita de los Juegos Olímpicos el próximo año?
R. Sin duda, es una competición que quiero disfrutar. No deseo ir con ningún tipo de presión ni tensión como la que, por nuestra parte, se ha despertado en este Europeo. Quiero disfrutar de los Juegos, competir con las mejores selecciones mundiales e intentar lograr un buen resultado. Será mi primera participación y espero que todo sea como digo.
P. ¿Tiene una espina clavada porque el seleccionador de entonces, Lolo Sainz, no le convocó para los anteriores, los de Sidney 2000?
R. Me habría gustado ir porque tenía 20 años y habría sido muy bonito que hubieran confiado en mí porque había hecho una buena temporada con el Barcelona. Después estuve con la selección sub 20 [en el Campeonato de Europa de la categoría] y me fui con una medalla [de bronce]. Pero, por lo que me han comentado, aquella concentración no fue muy buena. Los jugadores salieron muy quemados de de Sierra Nevada y el torneo fue bastante malo. Pero no pasa nada. Es algo que pocas puedes disfrutar: una o dos veces en la vida. Como deportista de élite, para mí es prioritario, me hace muchísima ilusión y espero que no haya ningún problema para estar en Atenas el próximo verano.
P. ¿Le ha costado mucho cambiar el chip de Memphis por el de la selección?
R. Se nota el cambio de equipo, de jugadores, de filosofía...
P. ¿El arbitraje?
R. También. Está claro que aquí pitan diferente que allí. A veces hablas con los árbitros y te dicen: "No, no... Esto, en la NBA, pero aquí no". Pero no me ha costado nada cambiar el chip. He tenido una mentalidad diferente porque aspirábamos a la victoria en cada partido. Eso me ha llenado de motivación.
P. ¿Ha recibido mucha estopa?
R. Como siempre. Tanto en Memphis como aquí, soy un jugador importante, que aporta cosas al equipo, y las defensas rivales intentan anularme como pueden.
P. ¿Qué sensación se le quedó tras conseguir 36 puntos y 12 rebotes ante Lituania y perder?
R. Por un lado, estoy un poco satisfecho por el acierto que tuve en el ataque, aunque en los tiros libres no atiné demasiado. Es la vez que más puntos he hecho en toda mi carrera. Pero ni pienso en ello ni lo he disfrutado porque perdimos la final del Campeonato de Europa. No sirvió para nada.
P. ¿Cree haber estado demasiado solo en el encuentro decisivo?
R. No siempre todos pueden estar bien. Sólo hemos anotado Juan Carlos [Navarro], Jorge [Garbajosa] y yo. Este equipo tiene otros jugadores que también pueden anotar. Absorbimos bastante el juego ofensivo y creo que algunos debieron haber asumido más responsabilidad. Eso nos habría dado mayor libertad en el juego y todos habríamos estado contentos y con más energía positiva.
P. Han ganado la medalla de plata. ¿Tienen de verdad capacidad para dar el último paso hacia la de oro?
R. Sí. Teníamos una buena oportunidad, lo reitero. Es difícil de por sí llegar a la final de un Europeo. Ha sido una lástima porque sí teníamos la capacidad necesaria [para ganar]. No fue una final en la que saliéramos pensando: "Hostia, qué buenos son los otros. Saldremos y, si ganamos, ganamos; y, si no, no". Creo que teníamos la posibilidad de haber jugado mejor el partido y haber ganado a Lituania. Con un poco más de alegría, habrían salido mejor las cosas y nos habríamos quitado la tensión y la presión de encima, que se reflejó bastante en las caras de todos los jugadores.
P. ¿Cuándo regresa a Memphis?
R. Dentro de una semana.
P. ¿Cuáles son sus objetivos en su tercera campaña en la NBA?
R. Continuar con mi progresión como jugador e intentar que mi equipo mejore y gane más partidos, que es lo fundamental.
P. ¿Acaba su contrato al término del curso o hay una opción de que le sea renovado por parte de los Grizzlies?
R. Tengo firmados tres años más dos opcionales por parte del club. O sea, que todavía quedarán dos años y estaremos ahí.
P. ¿Han fichado a otro pívot?
R. El club lo intenta, pero es muy difícil que algún jugador quiera venir a Memphis por la situación del equipo y la ciudad en sí, que no es demasiado atractiva. Es difícil que algún jugador de nombre y de importancia decida ir a Memphis.
P. Si fichasen a un pívot...
R. Me iría bien porque me quitaría un poco de peso en el juego interior. Podría actuar un poco más de 4, más abierto. Le daría más versatilidad a mi juego y me protegería de emparejarme siempre con el jugador más fuerte del conjunto rival, que siempre es un inconveniente.
P. Tiene en perspectiva dos partidos amistosos, en París y Barcelona.
R. Será una novedad para mí irme el tercer año allá para regresar al cabo de dos semanas. Pero intentaré disfrutarlo, aunque será un palo físico importante por los viajes. Serán cuatro días, ida y vuelta, y seguiremos la pretemporada. Viniendo de entrenarme allá diez días, será físicamente duro. Pero tenemos muchas ganas de jugar en Barcelona, en el Palau Sant Jordi y contra el Barça.
P. Los jugadores de la NBA han marcado la diferencia en Suecia.
R. Como debe ser, en principio. Un jugador de la NBA debe demostrar por qué está allí y por qué no está aquí. Pero el mejor ha sido Saras [Jasikevicius, lituano y ex barcelonista].
P. ¿Le ha gustado algún jugador nuevo?
R. El lituano que ha fichado el Tau [Macijauskas]. Juega con mucha intensidad y es muy completo.
P. ¿Cree que Zukauskas está para irse a la NBA?
R. No. Es limitado. Hace un buen trabajo porque es grande, intimida en la defensa, recoge en el ataque lo que le dan y... poco más.
P. Italia, sin ningún jugador de la NBA ni una gran estrella, ha obtenido un buen puesto: el tercero.
R. Sí. Todos esperaban que quedara eliminada nada más empezar el campeonato, pero ha creado muchos problemas a todos los equipos en la fase final. Antes ya se los dio a Alemania y después a Grecia. A nosotros estuvo a punto de ganarnos y ha derrotado a Francia. Ha hecho un buen trabajo.
P. ¿Seguirá habiendo cantera europea para la NBA?
R. Sí. Cada vez salen más talentos y todos los jóvenes piensan que tienen la oportunidad de irse a Estados Unidos y hacerlo tan bien como lo hemos hecho otros.
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