Deco, el exótico Mido y Matthäus

Fiel a su perfil sin grandilocuencias y consciente de la condición de favorito de su equipo, Emilio Butragueño, adjunto a la dirección deportiva del Madrid, resumió sus impresiones sobre los rivales declarando lacónicamente: "Hay grupos más difíciles. Me siento moderadamente optimista. Pero en la Copa de Europa un error puede ser terrible".

- Oporto. Un clásico del fútbol europeo más que acostumbrado a cruzarse en el camino del Madrid. La Copa de la UEFA brilla en su sala de trofeos, pero en el césped es Deco su elemento más deslumbrante. La Liga de Campeones quizás defina de una vez la auténtica dimensión futbolística de este habilidoso y vertical media punta que constituye el valor más fiable del cuadro dirigido por Mourinho, que ha reforzado su vanguardia con la contratación de Benny McCarthy y que conserva casi intactas sus maneras de la pasada campaña: buen trato del balón y cierta falta de consistencia en las dos áreas.

- Marsella. Los escándalos financieros que asolaron al club bajo el mandato de Bernard Tapie han marcado la historia reciente del conjunto francés casi tanto como el recuerdo de la Copa de Europa conseguida en 1993 frente al Milan. Desde entonces no ha ganado títulos y ahora intenta resurgir bajo el control de una conocida marca de ropa deportiva. El equipo toma la iniciativa en su estadio y suele atrincherarse fuera, con el refuerzo del ex barcelonista Christanval, en espera de que Mido y Drogba resuelvan en el área rival los contragolpes guiados por Chisef o el checo Vachousek, un zurdo de apariciones intermitentes y especialista en jugadas de estrategia.

- Partizán. La memoria de los aficionados madridistas conserva en blanco y negro la final de la Copa de Europa de 1966, en la que Amancio y Serena lograron remontar el tanto inicial de Vasovic para levantar el trofeo por sexta vez para el conjunto blanco. El Partizan de la actualidad ha logrado salir del lodo de la posguerra balcánica. Su técnico, el ex internacional alemán Lothar Matthäus, le ha dado cierto carácter competitivo, como lo demuestra el hecho de que las dos eliminatorias previas que le han llevado a la Champions, contra el Djurgarden y el Newcastle, fueron resueltas a domicilio. Destaca el inteligente centrocampista ofensivo Sasa Ilic y el siempre duro central nigeriano Taribo West.