Chicos normales
"¿Sabes qué te digo? Que somos normales... muy normales", dice en el baile de su boda el acomplejado Jim (Biggs) a la ninfómana flautista (Hannigan) que se echó de novia en una entrega anterior de la más taquillera de las sagas de jóvenes descerebrados paridas por el cine americano en la última década. Y lleva razón: porque de lo que va esta tercera parte de American Pie es de recordar que, incluso en el caso de chicos tan gamberrillos, al final de sus desgastes testosterónicos, de sus villanías, de su manera tan peculiar de meter la pata, está el matrimonio. O sea, la edad adulta. O sea, el ser como sus padres. De eso va la cosa: de intentar borrar de un plumazo cualquier atisbo crítico para sancionar el triunfo definitivo del amor, vía vicaría. Definitivamente, sólo soportable para amantes de la serie, adolescentes que no se hagan muchas preguntas y niños eternos que van al cine esperando olvidar todo cuanto no esté directamente en la pantalla.
AMERICAN PIE ¡MENUDA BODA!
Director: Jesse Dylan. Intérpretes: Jason Biggs, Alyson Hannigan, January Jones, Thomas Ian Nicholas, Sean William Scott. Género: comedia adolescente, EE UU, 2003. Duración: 95 minutos.
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