'A dos metros bajo tierra' acaba el curso con dudas sobre el regreso de la serie

Llegó en mayo a Televisión Española avalada por la etiqueta de "serie de culto", seis emmys -los Oscar de la televisión- y 16 candidaturas en la convocatoria de este año. Pero A dos metros bajo tierra despidió el pasado martes su primera temporada y la cadena pública no puede confirmar su continuidad el próximo curso. Con una audiencia de 723.000 espectadores y una cuota de pantalla del 6,5%, la familia Fisher se acerca a la media de La 2, en torno al 7%.

Televisión Española compró los derechos de emisión de A dos metros... -una idea original de Alan Ball, Oscar por su guión de American beauty, producida por el canal de cable HBO- y la guardó en un cajón hasta el pasado mes de mayo, cuando puso en marcha el contenedor Noche de series, dirigido a un público "que no encuentra series de este tipo en una cadena generalista, gente que busca un producto distinto", explicaba en la presentación Celina Velasco, directora de antena de la cadena pública. Un caso parecido al de El ala oeste de la Casa Blanca, otra multipremiada comedia que aguarda una oportunidad para su estreno. TVE anunció para la pasada primavera la llegada del presidente demócrata Josiah Bartlet -interpretado por Martin Sheen- y aún se le espera, y ahora ha despedido los 13 primeros episodios de A dos metros... sin precisar si volverá a abrir la funeraria de la disfuncional familia Fisher. Hasta finales de agosto, Noche de series ofrecerá doble entrega de 'Las chicas Gilmore', la otra comedia incluida en el contenedor.

El final de A dos metros... ha coincidido en horario con la quinta temporada de Ally McBeal -uno de los éxitos históricos de audiencia de Tele 5 en cuanto a ficción estadounidense-, que el pasado martes se acercó a los dos millones de espectadores (19,5% de cuota de pantalla) en el primero de los dos capítulos emitidos.

También en la madrugada, en este caso de los viernes, la cadena privada ha abierto el hueco para otro producto de lujo: Hermanos de sangre. La miniserie, producida por Steven Spielberg y Tom Hanks e inspirada en Salvar al soldado Ryan, interesó en su estreno, el pasado 1 de agosto, a 785.000 televidentes (18,2% de share).