La policía detiene a ocho búlgaros por extorsionar a compatriotas con falsos permisos de residencia

Ocho personas de nacionalidad búlgara han sido arrestadas como presuntos miembros de una red internacional dedicada al tráfico ilegal de seres humanos que operaba en Alicante, Valencia y Madrid. La banda ofertaba en su país de origen falsos permisos de trabajo y de residencia por un precio que oscilaba entre los 300 y 600 euros, según la Comisaría de Alicante.

Mediante anuncios en prensa y contactos personales, la organización captaba a personas que atravesaban una difícil situación económica y les ofrecían la posibilidad de regularizar su situación en España y la obtención de un empleo. Una vez llegados al territorio nacional, dos individuos, H. D. I., y E. N. I., de origen búlgaro, eran los encargados de alojar a las víctimas en dos apartamentos de la playa de San Juan para después distribuirlos en diferentes puntos del litoral mediterráneo, según fuentes policiales. Pasados unos días, los estafados advertían que habían sido objeto de engaño. La red no sólo no les proporcionaba los documentos reglados sino que les extorsionaba para que efectuaran el pago comprometido. Las víctimas debían saldar las deudas bajo la amenaza de que serían expulsados o bien dañarían a su familia en Bulgaria. "En la mayoría de los casos se encontraban en España, después de haber desembolsado una importante cantidad de dinero que suponían todos sus ahorros", informó la policía. El tráfico ilegal de personas se destapó a raíz de la detención de una mujer búlgara que prometía permisos de residencia y de trabajo a cambio de importantes sumas de dinero. Entre los arrestados se hallan los supuestos cabecillas del entramado, dos hombres búlgaros, que fueron localizados en Madrid, según fuentes de la Comisaría. El resto de los miembros fue arrestado en Alicante. Los ocho están acusados de un delito contra el tráfico de personas.