Detenida una mujer acusada de matar a su marido a golpes en su casa

La policía detuvo a últimas horas de la noche de ayer a Paloma S. R., de 47 años, acusada de ser la supuesta autora de la muerte a golpes de su marido, José Gabriel Aldao Gil, de 48 años, según fuentes policiales. El crimen -que es el cuarto de violencia doméstica que se registra en la región en lo que va de año- se produjo en el quinto piso del inmueble número 40 de la calle de Béjar, esquina a la de Cartagena, en el barrio madrileño de la Guindalera (distrito de Salamanca).

Paloma telefoneó sobre las 21.40 al servicio de emergencias 112 para informar que su compañero sentimental sufría una grave hemorragia intestinal. Cuando llegaron a la vivienda los facultativos de una UVI móvil de Summa, comprobaron que el hombre presentaba numerosos golpes en el cuerpo y, al menos uno de ellos, en la frente. Los médicos ni siquiera realizaron maniobras de reanimación de la víctima, tras comprobar que ésta había muerto.

Agentes del Grupo V de Homicidios se personaron en la vivienda y, a la vista de los indicios, procedieron a la detención de la mujer como supuesta autora de la agresión a José Gabriel. A primeras horas de la madrugada de hoy, los policías estaban registrando la vivienda en busca de un objeto contundente que pudiera haber sido empleado para atacar al fallecido.

"He oido que la mujer estaba como ida y que quería limpiar el polvo de la casa y bajar a tirar la basura al contenedor de la calle, pese a que tenía la casa llena de policías", explicó una vecina del inmueble. Pero tanto ésta como otros inquilinos sabían muy pocos detalles de la pareja implicada en el sangriento suceso.

"Creo que sólo llevaban unos tres o cuatro meses de alquiler en el piso y estas personas apenas mantenían contacto con los demás vecinos", señaló un joven que vive en el cuarto piso. No obstante, definió a Paloma como "una mujer con una mirada rara y con cara de trastornada". Una compañera de piso recordó que había escuchado gritos y discusiones entre la pareja en al menos dos ocasiones durante el escaso tiempo que José Gabriel y Paloma llevaban residiendo en la finca.

Este nuevo homicidio eleva ya a 73 las muertes violentas registradas en la región en lo que va de año. El anterior crimen se produjo el pasado viernes: Raúl Enrique León Vélez, de 27 años, un peón de albañil de origen ecuatoriano, murió de tres disparos efectuados por un individuo al que un compañero de León se negó a darle un cigarrillo. Ocurrió ante un edificio en construcción del nuevo barrio de Las Tablas, en Madrid.