"Ha sido muy duro"

David Beckham, el nuevo centrocampista del Madrid, reconoció ayer que ha sido "muy duro" marcharse del Manchester United de la forma como lo ha hecho y que echará mucho de menos a sus compañeros y amigos, aunque confía en que tanto el club de Old Trafford como él mismo tendrán éxito por separado.

"Estoy viviendo una mezcla de emociones porque es muy duro marcharse así", sentenció Beckham en una entrevista concedida a la televisión del Manchester que recoge Europa Press; "todos los jugadores son como una familia y es triste, pero tengo que seguir adelante, de la misma manera que lo hará todo el mundo en el club".

Beckham destacó que lo que más echará de menos será a los compañeros con los que creció. "Soy el primero de los seis que formábamos el curso del 92 en marcharse. Crecí con Nicky Butt, Paul Scholes, Ryan Giggs y los hermanos Neville, Gary y Phil, y siempre serán mis amigos, parte de mi vida. Pero tengo que mirar hacia delante y afrontar el reto".

De todas formas, y pese al nuevo reto, dejó claro que su cariño por el Manchester seguirá vivo siempre: "He jugado 13 años en él, siempre he sido seguidor suyo y siempre lo seré". Una vez más, dejó claro que sus problemas con Alex Ferguson no han tenido nada que ver con su salida y sólo tuvo buenas palabras para su ex técnico.

Ahora afronta una nueva andadura, pero todavía parece no tener muy asumidos todos los cambios que se han producido en su vida, aunque está deseando estrenar su nueva elástica. "Mi cabeza probablemente no se aclarará hasta que conozca al resto de los compañeros, a la gente del Madrid, y comience a entrenarme. Creo que realmente no me daré cuenta de todo hasta que salte al estadio Bernabéu con la camiseta puesta", concluyó Beckham.