Bilbao sólo mantiene un miembro del equipo de Bergara en la Diputación
Reitera que la institución defenderá "activamente" el 'plan Ibarretxe'
El nuevo diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, investido ayer, ha prescindido de la práctica totalidad del equipo de su predecesor. Por parte del PNV sólo continúa un diputado foral, Patxi Sierra-Sesumaga, aunque en distinto departamento; de Agricultura pasa a un área de más peso, Relaciones Municipales y Urbanismo, y se convierte en la mano derecha de Bilbao a ser teniente de diputado general. La Diputación mantendrá diez áreas, con sólo una mujer: Belen Greaves, en Cultura.
En su discurso de investidura, Bilbao insistió en su defensa de la propuesta del lehendakari Juan José Ibarretxe de un estatus de soberanía compartida entre el País Vasco y España. Si en la campaña electoral ya defendió este plan, ayer manifestó "solemnemente" que la Diputación vizcaína "será un agente activo" en la defensa del mismo, cuyo texto articulado presentará el lehendakari en septiembre. Afirmó que es la única propuesta existente para "arreglar los problemas de este pueblo".
No fue la única alabanza a Ibarretxe, a quien comparó con el presidente brasileño Lula da Silva, porque ambos tienen "como objetivo de su acción política las personas con cara y ojos". Aseguró que no hay independencia "que valga la vida de un ser humano" pero censuró también la ilegalización de Batasuna y el cierre de Egunkaria.
La mayor parte de sus 75 minutos de discurso se centró en explicar su filosofía de gobierno, con actuaciones concretas. El PSE lamentó la defensa del plan Ibarretxe y pidió más poder para los ayuntamientos, el PP criticó el descenso de la economía vizcaína, mientras IU reclamó cambios fiscales y sociales.José Luis Bilbao desgranó durante una hora el decálogo de actuaciones que se ha marcado como máximo responsable institucional en Vizcaya. Abogó por un pacto social con los otros dos territorios vascos para disponer de unos servicios sociales homogéneos y, en esta materia, planteó nuevas fórmulas para financiar las nuevas infraestructuras, como una mayor implicación de la iniciativa privada.
Bilbao se plantea, por vez primera en la historia de la Diputación, la compra de suelo urbanizable para abaratar la vivienda y cuestionó la validez de las medidas de desgravación fiscal actuales por la adquisición de la residencia habitual. A su juicio, "sólo provocan un descuento" para las personas con ingresos desahogados, aunque no detalló qué alternativa tiene el sistema vigente. En el ámbito fiscal confirmó que la UPV elaborará un estudio sobre el fraude y cómo atajarlo También planteó poner en marcha otro parque tecnológico como el de Zamudio,en Abanto y Ortuella., y anunció la otro parque empresarial junto al campus de la UPV en Leioa que sirva de incubadora de empresas.
Además de impulsar el uso del euskera, negociará con el Gobierno para que se ubique en Vizcaya el Museo o Archivo Nacional vasco. En obras y transportes, continuará las actuaciones impulsadas en los últimos años, como la nueva gran variante de Bilbao (la llamada Supersur), y defendió la extensión de Internet en banda ancha en todos los municipios. Bilbao dijo que creará un área específica para las relaciones con los ayuntamientos y citó proyectos concretos como un plan estratégico para Orduña, el desarrollo rural del valle de Carranza con un complejo industrial alimentario o un plan de reordenación urbana de Lekeitio.
Un equipo a la medida
En el gobierno foral, a los dos diputados de EA -Sabin Arana, en Empleo, y Tontxu Campos, en Promoción Económica, que iba a ser ratificados por su ejecutiva-, se unirán ocho del PNV, como en la anterior legislatura. La diferencia es que Bilbao ha realizado una auténtica barrida de entre sus compañeros de partido. Esta limpieza ya se presuponía tras el problemático proceso interno en el que fue elegido candidato. El nuevo diputado general contó con el respaldo de la ejecutiva del partido de Vizcaya, mientras que el Arzalluz y otros dirigentes del partido apostaron por la continuidad de Josu Bergara.
Al margen de las intenciones que tuviera Bilbao, el apoyo a Bergara de la mayoría de sus diputados anticipó ya su salida de la Diputación. La única excepción es Sierra-Sesumaga, que pasa a Relaciones Municipales. En las otras carteras se ha rodeado de personas de su plena confianza. Belén Greaves estará en Cultura; Iñaki Hidalgo, en Administración Pública; José María Iraurrizaga, ex viceconsejero del Gobierno vasco, en Hacienda; Juan María Aburto, también muy cercano al diputado general, en Acción Social; Eusebio Melero, es concejal en Bilbao, en Obras y Transportes; Eugenio Larrazabal, ex alcalde de Zeanuri, en Agricultura, y Josu Madariaga, en Medio Ambiente, donde ya estuvo en 1991 como director.
Antes, en la replica de los grupos, el socialista José Antonio Pastor le reprochó la defensa del plan Ibarretxe y lamentó que su gobierno nazca "con una sombra", en referencia a la sentencia del caso Azpiegitura. Carlos Olazabal (PP) calificó el discurso de "absolutamente vacío" y lamentó que en el último medio siglo la economía vizcaína haya crecido menos que la media española.
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