Simancas se somete a la investidura pero advierte de que no gobernará

La presidenta de la Asamblea de Madrid, Concepción Dancausa, del PP, convocó ayer el pleno de investidura a la presidencia de la Comunidad de Madrid para el viernes, después de que el socialista Rafael Simancas le transmitiera su intención de someterse a la confianza de la Cámara. Simancas no tiene intención de ser investido presidente -"nunca lo seré con el voto de los dos tránsfugas", declaró ayer a EL PAÍS-, sino combatir la, a su juicio, estrategia del PP para disolver la Asamblea de forma inmediata y convocar elecciones.

Dado que Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez, los dos diputados desertores, anunciaron ayer que votarán a Simancas, será necesario que dos o más socialistas se ausenten en la votación o voten en blanco para que el candidato socialista no resulte elegido.

Simancas quiere que se convoquen elecciones anticipadas, pero una vez consumido el plazo de dos meses que establece el reglamento del Parlamento regional sin que ningún candidato logre el apoyo del mismo. Asimismo, el candidato socialista quiere aprovechar la sesión de investidura para "dar a conocer a los madrileños el programa que tanto asusta a los especuladores y delincuentes urbanísticos". El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, calificó la crisis de la Comunidad de Madrid, en declaraciones a la cadena SER, como "el golpe más duro a la democracia española desde el 23-F".

La portavoz del PP, Esperanza Aguirre, criticó la decisión de su rival político. "Simancas ha estado engañando a los ciudadanos madrileños durante 15 días", manifestó.