Balbás pide la dimisión del líder de la FSM y le acusa de "ir de novia ofendida"

El máximo dirigente de la corriente socialista Renovadores por la Base, José Luis Balbás, pidió ayer la dimisión del candidato del PSOE a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Rafael Simancas, y criticó su actitud por "ir de digno y de novia ofendida", cuando lo que, a su juicio, ha hecho "es criminalizar a terceros y tirar la piedra al aire cayéndole al final a él mismo".

Balbás aseguró no entender cómo el PSOE no había añadido el nombre del líder de los socialistas madrileños en la querella interpuesta por supuestas relaciones ilícitas de algunos miembros del partido con constructoras y promotoras inmobiliarias. En concreto, acusó a Simancas de "haber tenido una relación comercial con Euroholding", pues, según dijo, el candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid adquirió un chalé en la localidad madrileña de Arroyomolinos en una parcela que era propiedad de esta promotora. Balbás dijo tener esperanza en que, por ese motivo, el PSOE también suspenda de militancia a Simancas, tal y como ese partido ha hecho con él.

El principal dirigente de Renovadores por la Base sostuvo que el PSOE le ha expulsado "sin pruebas, sin juicio y sin ser escuchado".

Según Balbás, la crisis abierta en la Asamblea de Madrid por la deserción de los diputados socialistas y miembros de Renovadores por la Base Eduardo Tamayo y Teresa Sáez ha sido causa directa del "conflicto político interno que existe dentro de la ejecutiva de la FSM".

"Cabeza de turco"

También criticó que se "judicialice la política" y que se expulsara del PSOE a Tamayo y Sáez muy poco después de su deserción, "cerrando toda las puertas a cualquier tipo de solución". Balbás sostuvo que se ha utilizado al secretario de organización del PSOE, José Blanco, como "cabeza de turco" y "escudo" para "desviar la atención y la responsabilidad política de algunos dirigentes".

Balbás añadió que, según sus abogados, la querella que se ha presentado contra él por supuestas vinculaciones con la deserción de Tamayo y Sáez y con una trama de intereses urbanísticos en Madrid "carece de base y no tiene pruebas". También anunció que presentará una querella "por acusaciones falsas, infundadas y difamatorias".