El Barcelona plantó al Atlético y se negó a jugar la semifinal de Copa

El Barça cumplió su amenaza y no jugó el partido de vuelta de las semifinales de Copa del Rey ante el Atlético. Una alineación azulgrana compuesta por 10 futbolistas se limitó a pisar el Nou Camp, pero al borde del terreno de juego. Sólo entró en el campo Guardiola para anunciar al árbitro la negativa de su equipo a jugar. Los madrileños se clasificaron así automáticamente para la final del torneo (ya habían ganado 3-0 en la ida). El Barça, según el reglamento, será sancionado con una multa de hasta dos millones y no podrá jugar la próxima edición de la Copa. El Barcelona, que tenía parte de su plantilla con la selección holandesa, no quiso adelantar unas horas el partido, lo que le hubiera permitido tener suficientes jugadores.