Lo nunca visto en la lucha por el título

Rebozadas por los títulos europeos alcanzados hace nada por el Barcelona y el Pamesa, las eliminatorias por la corona de la Liga ACB llegan más amenizadas que nunca. Los desafíos individuales prometen: ¿Continuará arrasando Bodiroga? ¿Serán capaces Oberto y Tomasevic de repetir título, esta vez con la camiseta del Pamesa? ¿No habrá sido más que un aviso el arreón con el que Ivanovic metió al Tau en la contienda para así poder revalidar el título? ¿Será Felipe Reyes definitivamente el hombre del año tras cuadrar una impresionante hoja de servicios en la fase regular: 16,88 puntos, 10,41 rebotes, 1,94 recuperaciones, 1,38 mates y 5,91 faltas recibidas de media por partido? ¿Bullock, Okulaja, Gurovic... pondrán por fin en órbita a Unicaja? Se agolpan las preguntas en vistas de unas eliminatorias en las que el gran ausente será el Real Madrid, tan encogido que ha tenido que bajar la persiana a mediados de mayo. No ha sido el caso de las tres novedades respecto al año pasado en el cuadro de cuartos de final: el Auna Gran Canaria, el DKV Joventut y el Lucentum Alicante.

- Unicaja-Tau. El duelo merecería pertenecer a semifinales, cuanto menos. De hecho ambos protagonizaron la última final, en la que barrió el Tau: 3-0. Pero los vitorianos han sufrido de lo lindo esta temporada, en la que por el Araba Arena han vuelto a desfilar un batallón de extranjeros -Allen, Bennett, Mottola, Phillips, Sims y Bilba- hasta dar con el equipo definitivo. El picante de la eliminatoria es que estará en juego la clasificación para la Euroliga. Este derecho se logra en base a un contrato que tiene en cuenta un baremo de puntuación en diferentes competiciones. Si el Tau se mete en semifinales se garantizará su presencia en la Euroliga durante los tres próximos años, mientras que si el Unicaja elimina al equipo vitoriano disputará la próxima Euroliga y, si llega a la final, también podrá firmar un contrato para disputar el torneo continental las tres próximas temporadas. El Unicaja se ha reforzado con el fichaje del ala-pívot Reggie Slater.

- Pamesa-DKV Joventut. El equipo de Paco Olmos, tras el varapalo de perder por lesión a Abbio y ser eliminado por el Tau en las semifinales de la Copa que se disputó en Valencia en febrero, se ha recuperado, ha ganado la Copa ULEB, ha concluido en el segundo puesto la fase regular de la Liga y ha recuperado el equilibrio con el fichaje del escolta griego Liadelis. El Joventut se ha colado a última hora en las eliminatorias, de las que había estado ausente durante las últimas cuatro ediciones. Lo ha logrado gracias a su poderío ofensivo (83,7 puntos de media, el segundo mejor) y al rendimiento de dos de los fichajes que realizó el pasado verano: el base Marco y el pívot croata Tabak.

- Estudiantes-Auna. La eliminatoria promete por el juego ofensivo en que se basan ambas escuadras. El Auna ha sido el equipo revelación y ha ganado los últimos partidos de la fase regular con un equipo que exprime al máximo el talento de sus americanos: Lewis y Eley y que no podrá contar con su base, David Brabender, lesionado, y al que ha sustituido Salva Camps, que actuaba en la Liga LEB con el Menorca.

- Barcelona-Lucentum. Sobre el papel, es la eliminatoria más clara. Además de su mayor calidad, la media de altura del quinteto titular azulgrana supera en diez centímetros a la del Lucentum. Pero el equipo de Alicante ganó por 85-75 al Barça el pasado 27 de abril, gracias a la colosal dirección de juego del argentino Prigioni, junto al que brillan el incombustible Perasovic y el americano Lou Roe, segundo mejor jugador de la fase regular tras Herrmann (Fuenlabrada).